La decisión de la Xunta de Galicia de depositar los hallazgos en el Museo Massó no ha sentado del todo bien en Ribadeo. Este descubrimiento ha servido para que en la localidad se vuelva a hablar de la necesidad de construir un museo vinculado al patrimonio histórico que alberga esta ría. La responsabilidad de custodiar el patrimonio subacuático es de la Xunta de Galicia, a través de la Consellería de Educación e Cultura, y decidió que los restos encontrados en Ribadeo se trasladasen a Bueu para su análisis y restauración. "Éste es un museo propiedad de la propia Xunta de Galicia y es un depósito que se puede levantar en cualquier momento", argumenta la directora del museo marinero buenense.

De momento no hay fecha para la llegada de ese patrimonio a Bueu ya que dependerá del actual proceso para retirar la salitre, requisito previo a cualquier otra actuación.