La Asociación Vecinal San Martiño salió ayer al paso del homenaje al párroco fundador de la iglesia de O Carme, don Donato, con motivo del traslado de sus restos al templo que él mismo fundó en 1964. El presidente del colectivo, José Antonio García Barreiro, asegura que los vecinos de San Martiño "no le podemos agradecer que empleara el producto de las tierras heredadas de su antecesor y las procedentes del culto de la capilla del Pazo de O Rosal para ayudar en la construcción de la nueva iglesia". Entienden que por culpa de quedar sin fondos la feligresía original de Moaña hubo que dejar caer la rectoral de San Martiño, "ahora reconstruida con ladrillos por el Concello", así como adosarle a la nave románica una inadecuada cubierta de hormigón.

Lamentan también que Don Donato alterase presuntamente "los datos de distribución por barrios y reparto de habitantes entre la parroquia segregada y la matriz, en beneficio de la nueva".