La décima edición de la Exposición da Camelia, que este año reunió en el pabellón de Domaio a más de 40 cultivadores de toda Galicia, cerró ayer sus puertas tras un domingo de constante goteo de personas.
Desde hace una década Domaio consiguió establecerse en el mapa de los amantes de esta flor de origen asiático pero que encontró en Galicia una veneración que hace que se sucedan las muestras y certámenes.
La tarde de ayer estuvo amenizada por la música de la banda Airiños do Morrazo, de Moaña.
Las organizadoras, de la Asociación de Mulleres A Poza da Moura, piensan ya en la siguiente edición.
Además de camelias se expusieron productos derivados como los aceites de esta planta y los cultivadores aficionados pudieron adquirir ejemplares para transplantar en sus propios jardines. La edición estuvo dedicada a Eduardo de la Rubia, iniciador de este evento.
