La campaña de recolección de semilla de mejillón en el litoral gallego está sujeta a una serie de limitaciones, sobre todo en los archipiélagos de Cíes y Ons. Así lo advirtieron en noviembre desde la sección de Acuicultura de la Consellería do Mar y así lo recuerdan en la actualidad diferentes agrupaciones de bateeiros a modo de indicación a sus asociados.

Hay que tener muy presente que la recolección de esa mejilla que el sector necesita encordar para preparar la siguiente campaña se lleva a cabo en los puntos rocosos de la costa donde el mar golpea con más fuerza, ya que la semilla de molusco comparte prácticamente el mismo espacio que el percebe.

De este modo está a disposición del sector una amplia superficie, prácticamente desde A Guarda y Baiona hasta Fisterra, pasando por O Grove, Corrubedo, Aguiño, Muros, Carnota y otros muchos lugares.

Pero, como se explicaba anteriormente, los importantes valores medioambientales de los archipiélagos de Cíes y Ons obligan a introducir ciertas restricciones, tal y como aconsejaba el pasado 18 de noviembre la dirección del Parque Nacional Marítimo Terrestre de las Islas Atlánticas de Galicia.

Tanto es así que en el archipiélago de Cíes únicamente se puede recolectar la semilla en la parte este de las islas del norte, es decir, desde Punta Farolillo al islote Viño, y en la cara sur del archipiélago, desde Punta Pau de Bandeira hacia Alto de Vicos.

Esto supone que está prohibida la recolección en la isla norte o de Monteagudo, en la Costa de Bufardo, así como en la zona de reserva del islote Agoeiro.

En cuanto al archipiélago de Ons, solo está permitido recoger cría de mejillón en la parte este de la isla principal, desde Punta Centolo a Punta Fedorento.

Quedan excluidas zonas como Cova da Vella, la playa de Melide, playa de Canexol y playa Pereiró, en la isla de Ons, así como la isla de Onza y los islotes menores de este archipiélago.

Hay que recordar que la semilla que ahora recoge el sector -tiene de plazo hasta el 30 de abril, salvo prórrogas posteriores- no es más que mejillón de apenas uno o dos centímetros de longitud.

Será entre mayo y julio, dependiendo de la ubicación de la batea en la que se realice el encordado, cuando esa cría -tendrá ya alrededor de 5 centímetros- será sometida al proceso de desdoble, para dividir el peso de una cuerda en dos o tres diferentes que servirán al mejillón para seguir creciendo hasta alcanzar su talla comercial.