Los cazadores de O Morrazo se echarán hoy de nuevo al monte. La nueva temporada de caza menor se abre hoy con expectativas que no invitan precisamente al optimismo. El conejo es la especie más apreciada, pero su población dista mucho de recuperarse. Todo a pesar de que desde Cangas y Moaña apuntan que las condiciones pueden ser ligeramente mejores que las de la anterior temporada.

El Tecor más amplio es el que agrupa los montes de Moaña y Marín, que agrupa a unos 180 cazadores de ambos municipios. Los principales cotos de caza están en los montes moañeses, especialmente entre las parroquias de Meira y Domaio. "Este año la peste no atacó y se mira algo de caza, pero aún sigue siendo muy poca", explican aficionados moañeses a la caza. "Somos muchos cazadores para poca caza", sentencian.

La sociedad canguesa de caza está formada por unas 80 personas, aunque los que salen al monte son muchos menos. "La gente sigue asociada y paga las cuotas para ayudar y poder hacer repoblaciones", explican desde la directiva. Este año se volvió a soltar conejo en los montes del Tecor, que abarca zonas de O Hío como Nerga o Donón, Varalonga, A Madalena y en menor medida Coiro. "Este año la enfermedad atacó fuerte allá por febrero, al final de la temporada anterior", cuentan. Aún así y gracias a la repoblación "se ve algún conejo". Aunque la campaña de caza menor estará abierta hasta el próximo 6 de enero en Cangas han decidido adelantar el cierre en lo que respecta al conejo. "Vamos a cerrar durante noviembre para que quede algo en el monte y se pueda regenerar", cuentan.

Las peores expectativas están en Bueu. "No hay prácticamente nada. A pesar de que se recauda una millonada con las licencias -50.000 en toda Galicia- y con los avances quye hay hoy en día parece que no intesa acabr con la enfermedad del conejo", se lamentan desde la directiva.