Las cuentas de la Mancomunidad en 2014, aunque arrojan una mejoría tras el plan de ajuste aplicado en la época del ex alcalde José Enrique Sotelo como presidente, siguen ofreciendo un remanente negativo de 500.000 euros, si bien no hay comunicación alguna de que la Xunta o Hacienda hayan decidido intervenirla. La presidenta Leticia Santos niega que esté intervenida y respecto a las cuentas dice que la situación está "saneada".

De todas formas, según las fuentes consultadas, la Mancomunidad ya acumula una deuda de 3 millones de euros con Sogama por la basura que se traslada para incinerar. Pese a todo, no son los 7 millones que le adeudaba en 2014 cuando se acogió a uno de los planes estatales de pago a proveedores y solicitó un crédito por ese importe para liquidar en 10 años. Precisamente en la junta de gobierno de mañana se informará de la bajada del tipo de interés de este crédito, que se contrató con el Sabadell, que pasa del 3,40% al 1,1% con un ahorro anual para la Mancomunidad de 78.000 euros.

El plan de ajuste se va cumpliendo, según las mismas fuentes y los usuarios no están descontentos con el servicio, pero los concellos siguen acumulando deuda. Van aportando cantidades esporádicamente. Bueu, que sigue pagando a Sogama a través de la Mancomunidad ya que no firmó el convenio por el cual Cangas y Moaña pagan directamente, ingresó 450.000 euros. Moaña también pagó 62.000. pero Cangas nada. Aún a pesar de estos pagos, la deuda de Bueu con la Mancomunidad supera en la actualidad los 600.000 euros; la de Moaña es de 1,1 millones de euros y la de Cangas 1,3 millones.