La concejala de Bienestar Social de Moaña, Araceli Gestido, asegura, igual que hizo Cangas, el Concello moañés ha puesto en marcha un registro de vecinos que se ofrecen para acoger a los refugiados que están llegando a Europa de países como Siria o Libia, bien en sus domicilios u ofreciendo la posibilidad de viviendas vacías.

Reconoce que para concellos con un tamaño como el de Moaña, este tipo de ayuda está fuera de sus competencias y lo único que pueden hacer es canalizar las ayudas de cara a otras instancias como el Fondo Galego de Cooperación o el Fondo de Inmigración. Aunque con el registro de vecinos y de viviendas, el Concello puede ir creando un banco de recursos posibles y estar preparado cuando se plantee la posibilidad de acoger a estos refugiados, además de demostrar a la Xunta y al Estado, que son los que tienen las competencias, de que sí hay personas a las que les preocupa la situación y quieren ayudar.

Por esta razón, la concejala de Bienestar de Moaña asegura que desde el Concello presionan para que el Estado y la Xunta vean el interés social que hay en este sentido y tomen una decisión sobre el número de refugiados que puede acoger España.

Por otra parte, y en relación al mensaje que lanzó el Papa Francisco para que las parroquias también se movilicen y acogan a refugiados, el párroco de Moaña, José Luis Muñiz, reconoce que todavía no es el momento "pero cuando lo sea, se hará, claro que sí". Desde la parroquia de Cangas, su titular, Severo Lobato, ya anunció que iba a gestionar el acogimiento con Cáritas.