La suspensión de licencias en el Concello de Bueu ha tocado a su fin. Dos años después de la aprobación inicial del Plan Xeral de Ordenación Municipal, la moratoria en la concesión de permisos fijada por ley terminó ayer sin que aún haya fecha para la aprobación definitiva del plan. El gobierno local, mientras, trata de acelerar la tramitación para hacerlo realidad cuanto antes y hoy mismo el alcalde buenense, Félix Juncal, se entrevistará con la conselleira de Medio Ambiente, Ethel Vázquez. Uno de los temas que se pondrá encima de la mesa es la solicitud del informe de evaluación medioambiental, documento que se espera para el mes de octubre y que, tras ser revisado por los técnicos y reenviado a la Xunta, situaría al Plan Xeral buenense en la antesala de su aprobación provisional.
El levantamiento de la suspensión de licencias supondrá el regreso a las Normas Subsidiarias de 1986, que son las que actualmente están en vigor, si bien desde el gobierno buenense apuntan que la tramitación del plan continuará igualmente. Este retorno a la reglamentación anterior supone en la práctica el desbloqueo de las licencias que fueron paralizadas en su momento, y que según apuntan desde el departamento de Urbanismo, suponen unas cuatro o cinco. Pero además, y mucho más importante, abre la posibilidad de que los vecinos que lo deseen puedan plantear nuevos proyectos ajustados a esa normativa antigua, aún cuando pudieran entrar en colisión con el nuevo plan. Y es que evitar esos posibles conflictos era el objetivo de la moratoria de dos años, en lo que parecía tiempo suficiente para dejar listo el PXOM. La interrupción de licencias no fue total en este periodo, sino que solamente afectó a aquellos casos en los que había una confrontación entre las Normas Subsidiarias y la reglamentación recogida en el Plan Xeral.
Desde el concello se considera que la incidencia que ha tenido esta suspensión ha sido mínima en el entramado urbano, toda vez que las alturas, coeficientes de edificabilidad y alineaciones ya estaban determinados. Sí en cambio ha afectado al ámbito rural, donde se recogen más variaciones en el nuevo documento marco urbanístico.
El levantamiento de la suspensión de licencias no supondrá un freno a la gestión del Plan Xeral, sino todo lo contrario. La intención del gobierno local es acelerar su tramitación y para ello continuará avanzando a pesar de no disponer del controvertido informe de la Dirección Xeral de Patrimonio, tantas veces demandado. "Dous anos despois seguimos agardando por esa resolución de Patrimonio", señala el edil de Urbanismo buenense, Martín Villanueva. En octubre del pasado año se dio contestación al primer informe pero desde entonces no ha habido noticias oficiales sobre ese informe, algo que se planteó en la reunión mantenida con este organismo en el mes de abril. Villanueva subraya que "nós fixemos un esforzo en conservación do patrimonio e na súa catalogación e polo menos gustaríanos que se recoñecese ese traballo", asegura. Y es que, paradójicamente, el ámbito del patrimonio es el que podría verse más afectado por el final de la moratoria, ya que el Plan Xeral amplía la protección de muchos inmuebles.
