Una vecina de Cela (Bueu), Yolanda Rey, sufre por tercer año consecutivo la presencia de la avispa asiática en su vivienda. "El primero formaron un nido en el hórreo, el año pasado en la chimenea y este verano en la contra de la ventana de la habitación", explica esta vecina de Castrelo. Para deshacerse de estas molestas inquilinas hace un año "tuve que tener encendida la chimenea en pleno verano para matarlas con el humo y el calor", explica.

El nido que han construido este año crece cada día, al igual que el nerviosismo de la propietaria. "Tengo una niña pequeña y tenemos todo cerrado para evitar que entren en casa. Pero aún así tengo miedo y apenas soy capaz de dormir", relata. Desde hace días está esperando la llamada del 112 para que envíen un apicultor a su casa de Cela para que se deshaga de estas peligrosas avispas.