Abalo se muestra crítico con la Autoridad Portuaria, pero más aún con las gestiones de sus predecesores en el gobierno cangués, convencido de que Sotelo y Soliño enviaron mensajes a la población que no se correspondían con la realidad, con el previsible fin de sacar rédito político. Corrobora que la secretaria del Concello "non ten coñecemento da firma de convenio algún coa Autoridade Portuaria", aunque quieren certificarlo con una reunión "entre o actual alcalde e o anterior" y cerrar "polémicas estériles".