La reconocida mariscadora Alicia Rodríguez acudió al acto de ayer en el Palacio Real acompañada de dos de sus hijas y de la presidenta actual de la Asociación de Mariscadoras de Moaña. Se hospedaron en el Hotel Eurostars de la capital, junto a la mayor parte de los profesionales de distintos ámbitos que recibieron la Orden al Mérito Civil. Ayer, ya en el aeropuerto de Barajas emprendiendo el viaje de vuelta a Moaña, la mariscadora recordaba lo vivido en los últimos dos días. "Nos recogieron en un microbús a todos, tanto el jueves para el ensayo como esta mañana -por ayer- para acudir al acto".
El vehículo las recogió pasadas las 10.00 horas y, tras la entrega de las medallas, disfrutaron de un ágape con los monarcas. "Cada condecorado traía a varios familiares o amigos. Creíamos que habría más protocolo y nos sorprendió lo cercanos que se mostraron los Reyes. No pusieron problema para hablar con todos ni para que nos acercásemos a sacar fotos", indica. Sobre las 14.00 horas regresaron a su hotel para partir hacia el aeropuerto.
Compañeras
El día de ayer era el día de Alicia Rodríguez, y los que trabajan con ella diariamente desde hace años lo sabían y así lo querían expresar. La presidenta de las mariscadoras, María Dolores Álvarez, indicó tras el acto que este galardón "supone un reconocimiento muy importante para todas las mujeres que se dedican a esta profesión. No solo en Moaña, sino a todo el colectivo en Galicia". Asegura también que se puso en valor el sacrificio "de las que empezaron" a dignificar la profesión de las mariscadoras.
Rodríguez comunicó esta misma semana a sus compañeras que iba a recibir este reconocimiento. Presidió el colectivo durante 30 años y no dejó de bajar a la playa ni cuando le llegó la jubilación forzosa. Cuando recibió la llamada de la Casa Real pensó que se trataba de una broma.
