Las obras de mejora de la carretera PO-551 entre Pontevedra y Rande se están convirtiendo en un auténtico tormento que está poniendo a prueba la paciencia de los usuarios y de los concellos de la comarca. La calidad del asfaltado y la programación de los trabajos, que estos días están provocando largas colas y molestias a los conductores en Bueu y Moaña, volvieron a generar ayer numerosas quejas en estos municipios.

Las críticas más contundentes proceden de Bueu y ayer mismo el alcalde del municipio, Félix Juncal, anunció la presentación de una moción al próximo pleno para reclamar explicaciones a la Xunta de Galicia, que es la titular de la vía. En esa moción se requerirá al gobierno autonómico que justifique la solución técnica escogida y se exigirá un asfaltado en condiciones, con una nueva capa de rodadura. "Estamos ante unha auténtica chapuza, ademais de que se trata dunha actuación inxustificada e inexplicable", afirma Juncal. El mandatario se refiere a que en lugar de un fresado y posterior pavimentado se optó por aplicar una "emulsión fría ou mestura bituminosa", una solución más barata pero que conlleva algunos inconvenientes. El que más están padeciendo los conductores es la constante presencia de gravilla, que es un auténtico peligro para los motoristas y que además en ocasiones acaba impactando en el parabrisas de los coches. "Nin sequera teñen a preocupación de limpar esa gravilla sobrante e que se desprende do firme", denuncia Félix Juncal.

Las críticas del Concello de Bueu van más allá e incluso se cuestionan la necesidad de estas obras y que realmente supongan una mejora con respecto al estado anterior de la carretera, que junto al Corredor do Morrazo es la principal vía de comunicación de la comarca. "É algo inaudito porque este proxecto vén a empeorar a situación anterior", clama el alcalde buenense. Juncal recuerda que cuando la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas aprobó el nuevo plan de seguridad vial Bueu presentó alegaciones en las que reclamaba que parte del presupuesto se destinase a urbanizar nuevos tramos de la PO-551 y la PO-315. "Para facer isto era mellor que se investise en mellorar a PO-551 ao seu paso por Agrelo e Loureiro e en construir aceras nos tramos entre Achadiza-Cabalo e Vilar-Bon", argumenta.

Esta situación está provocando un considerable malestar entre los automovilistas, unas quejas que están presentes todos los días en las redes sociales y que también se están trasladando al propio ayuntamiento. Desde el consistorio mostraron su comprensión por el enfado vecinal e instan a los conductores a presentar las reclamaciones ante la Xunta y la Consellería de Medio Ambiente, que son las titulares de la PO-551.