El portavoz del grupo municipal del Partido Popular de Bueu, José Manuel Rosas, presentará hoy la renuncia a su acta de edil en el concello buenense. Su papel como patrón mayor de la cofradía buenense y los desencuentros de los últimos tiempos con la Consellería de Medio Rural e Mar de la Xunta de Galicia por el Plan de Gestión del Pulpo han desencadenado una decisión que llevaba gestándose durante semanas e incluso meses. De hecho Rosas ya había comunicado su intención de dimitir a la dirección del partido y tan solo el deseo de no provocar una crisis interna ha retrasado una decisión que tenía y tiene carácter irrevocable. Rosas dejará también su función como presidente de la agrupación local del PP de Bueu y, aunque este último extremo no se ha podido confirmar, no se descarta que también abandone la militancia.

El Plan de Gestión del Pulpo auspiciado por la Xunta de Galicia había dejado a Rosas en una complicada situación, dividido entre las lealtades al partido o al sector, decantándose desde un primer momento por estas últimas. El cabildo buenense abandera la oposición al plan, defendiendo la posibilidad de dejar las nasas caladas en el mar a diario, al igual que sucede en la zona norte, y apostando por la realización de planes para todas las artes y no solamente para el pulpo.

Sin visos de alcanzar un acuerdo, desde las cofradías contrarias al plan se ha solicitado a la Xunta que recapacite y dé marcha atrás en sus intenciones iniciales. Y donde más de uno podría pensar que el hecho de compartir color político facilitaría el entendimiento, lo que se ha puesto de manifiesto ha sido un absoluto desacuerdo. En su fuero interno el patrón mayor se siente profundamente decepcionado y ha optado por abandonar el barco político para ponerse al frente de las reivindicaciones de los marineros buenenses.

Rosas pone fin, de este modo, a una aventura política que ha durado poco más de dos años. El patrón mayor del cabildo buenense fue captado para las filas populares para sustituir a José Barreiro y encabezar la lista que el PP presentó a las elecciones municipales de mayo de 2011. Los populares no lo tuvieron nada fácil para encontrar un candidato idóneo y de hecho apuraron las fechas para anunciar a Rosas, que no dispuso de demasiado tiempo para aclimatarse al ruedo político.

Sin embargo, su perfil de hombre conocido en el pueblo y valorado en el mundo del mar debía servir para atraer al electorado y liderar una lista de renovación que finalmente acabó siendo de continuidad. El fracaso electoral, con la demoledora victoria del BNG de Félix Juncal y el confinamiento del Partido Popular a únicamente cuatro concejales en sus peores resultados, le hizo dar un paso atrás en una función -la política- en la que nunca pareció sentirse excesivamente cómodo.

Su papel en la oposición ha sido discreto, ocupando un segundo plano, y no ha mostrado una excesiva beligerancia hacia el gobierno local. Esto hizo barajar durante mucho tiempo la posibilidad de que renunciase al cargo, algo que finalmente se ha hecho realidad mediada la legislatura. En todo caso, su salida deja el camino expedito para que el partido pueda buscar con tiempo suficiente un candidato para las elecciones municipales de 2015, en las que deberá tratar de recuperar parte del peso perdido en los últimos años.

FARO se puso ayer en contacto con José Manuel Rosas, que no quiso ni confirmar ni desmentir su renuncia y optó por mantener silencio sobre la cuestión.