Con la transformación de la histórica Casa do Médico en un consultorio el Concello también se garantiza la propiedad pública del inmueble. Y es que en mayo de 2011 sus tres propietarios acordaron, con los colectivos vecinales, ceder la vivienda a la administración local con la condición de que, en un plazo de cinco años, quede rehabilitado y se destine a usos sociales. Por lo tanto, Cangas solo tiene por delante tres años para evitar que la Casa do Médico regrese a manos privadas por incumplir el acuerdo.

La casa data de 1929, cinco años después de que un grupo de vecinos fundase la sociedad de socorros mutuos La Unión para contratar a un médico para la parroquia. Con ayudas de los emigrados de O Hío a Argentina, la sociedad inaugura estas instalaciones, permitiendo al médico vivir en la casa con su familia.

En 1980 el médico registró la casa a su nombre, con la consiguiente demanda por parte de los vecinos. Tras fallecer el doctor, su mujer continuó viviendo en ella y el alcalde pactó pagarle una residencia a cambio de que dejase el inmueble, una decisión que generó críticas por parte de la oposición.