Una decena de usuarios del comedor social de Cangas manifestaron ayer sus críticas a la gestión de este servicio. Concretamente, aseguran que la comida que reciben se encuentra en mal estado en muchas ocasiones y que se aprovecha de un día para otro. Asimismo, lamentan que a algunos de ellos los responsables del comedor social les exijan el pago de un euro por día para poder utilizar el servicio y se les tome sus datos personales. Unas acusaciones que desmiente categóricamente la responsable del centro, Ángela Rodas.

Según la propia Rodas la mayor parte de los usuarios no tienen quejas con respecto a la comida y se solicita la colaboración "voluntaria" con un euro al día de aquellos usuarios que cobran alguna pensión o prestación de algún tipo, "pero non é obligatorio aportar nada e non se lle nega a comida a ninguén por iso", defiende.

Los usuarios que alzaron su voz aseguran que en una institución de este tipo no se debe cobrar "20 euros al mes" y lamentan que no se les dé, a cambio, una factura de lo que pagan. Alegan que este problema se repite desde que el Comedor abrió sus puertas hace un par de años. "Un joven le pidió el libro de reclamaciones y se negaron a dárselo después de una comida en mal estado", asegura este grupo de usuarios. Piden a los socios que colaboran con el comedor "que se preocupen de comprobar el funcionamiento diario" del mismo. Asimismo, también se quejan de que en ocasiones se tira la comida que sobra "y cuando pides repetir te dicen que no se puede".

Desde el Concello aseguran no conocer estas críticas a un comedor que gestiona un colectivo solidario. La responsable del mismo defiende su gestión y señala que atienden a más de un centenar de personas cada día, cifra que se incrementó sensiblemente con respecto a la que acudía al comedor social hace dos años.