Los afectados por las preferentes en Cangas volvieron a irrumpir de golpe en la oficina central que NCG tiene ubicada en la calle Eugenio Sequeiros. Tras tomar las oficinas y obligar a paralizar la actividad, los afectados tuvieron la respuesta esperada desde el jueves: la presencia en la misma del jefe de zona y el jefe territorial. Pero lejos de calmar los ánimos, los afectados se mostraron mucho más indignados. "Nos quieren tomar el pelo. Vienen aquí y nos quieren vacilar", dice un portavoz de la Plataforma de Afectados de O Morrazo. "Insisten en decirnos que es Europa quien impide devolvernos el dinero y ahora la solución es que nos dan unos cromos que si los quieres convertir en dinero te quitan más".

El alcalde de Cangas, José Enrique Sotelo, no pudo mostrarse más descontento con el decreto que sacó el Gobierno de Rajoy. Lo calificó de ambiguo, de poco claro y que no resuelve el problema de los vecinos. "Lei varias veces el decreto y habla de muchas cosas, pero no concreta nada. Dice que se seguirá con el arbitraje, que se acelerará, pero es algo que llevan diciendo meses. Una cosa es tener la voluntad de continuar con el arbitraje y otra muy distinta tener el dinero para hacerlo. Que lo digan. No hace falta ser muy inteligente para darse cuenta de que el problema es de liquidez, por mucho que ellos se nieguen a admitirlo", dice el regidor cangués.

Sotelo asegura que lo que está sucediendo no es ni ético ni razonable, pero descarta dimitir. Y lo dijo en varias ocasiones. Esa fórmula no va a devolver el dinero a los afectados. Estamos hablando de algo más profundo de la supervivencia de los ciudadanos", apunta el regidor local que para nada tiene la intención de marcharse del PP si no se soluciona el problema, como anunció su correligionario del Concello de Oia.

El alcalde mantuvo ayer por la mañana y por la tarde con los afectados por las preferentes. No le sentó muy bien el hecho de que ni el jefe de zona ni el territorial quisieran que él estuviese en la reunión con los ahorradores.