Cangas tiene desde hoy una "sucursal" de la alcaldía en un contenedor de obras instalado en la calle Eugenio Sequeiros. El regidor, José Enrique Sotelo, cumplió ayer el compromiso anunciado en el pleno de enero y ordenó trasladar el habitáculo al entorno de la Casa da Bola, a escasos metros de la oficina central de Novagalicia Banco (NCG) donde llevan dos meses protestando los afectados por las participaciones preferentes y obligaciones subordinadas. En aquella sesión plenaria la corporación local aprobó por unanimidad una moción de apoyo a los "estafados" y Sotelo adelantó sus intenciones de llevar la alcaldía a la primera línea de lucha, que ahora ejecuta. El estreno oficial de las nuevas dependencias, decoradas con una imagen desde Cabo Home con las Illas Cíes al fondo, se producirá hoy a la una y media de la tarde con una junta de portavoces que tiene como cometido, precisamente, valorar la situación de los afectados y las medidas de presión a la entidad para que les devuelva su dinero. La junta de gobierno y la comisión informativa del lunes también se celebrarán en la caseta, al igual que otras gestiones que no precisen de la infraestructura de la casa consistorial.
El alcalde ya había anunciado que no quería que la moción aprobada entonces -que incluye instar a la Xunta, a Novagalicia y al FROB a continuar con el arbitraje y a la Fegamp a crear una mesa de trabajo con los concellos que acuerde medidas en caso de falta de colaboración de la entidades de crédito- quedara en una simple declaración de intenciones, teniendo en cuenta que era la tercera que se llevaba a un pleno de Cangas con este problema, y que estaba dispuesto a medidas más contundentes. Los últimos datos recibidos sobre casos pendientes (unos 840, tras los 14 resueltos en la última semana y 456 desde que se inició el proceso) "no responden a las expectativas" generadas tras la reciente entrevista en A Coruña con el presidente de Novagalicia Banco, José María Castellano, por lo que Sotelo, en sintonía con los demás miembros de la corporación municipal, ha decidido pasar a la acción.
La nueva oficina de la alcaldía convivirá en el entorno con otra caseta de similares características, instalada en la calle por los afectados con permiso del alcalde. Sotelo no olvida que algunos representantes de NCG llegaron a sugerir a los concentrados que trasladaran sus protestas a la casa consistorial, ya que así tendrían más eco y posibilidades de resolverse. Ahora, llevando la alcaldía a la zona de acampada, el regidor concentra allí a los actores políticos y económicos relacionados con el asunto.
El contenedor, requisado hace meses a una empresa deudora del Concello y almacenado desde entonces en el estadio de atletismo, tiene siete metros de largo por dos y medio de ancho. Algo menos de 18 metros cuadrados de superficie que se reparten en tres dependencias: la oficina del alcalde, con el escudo institucional en la pared, una sala de juntas y un aseo ubicado entre ambas. Además, cuenta con radiadores eléctricos de calefacción. En los últimos días una empresa del municipio se encargó de su decoración exterior con una imagen turística de Cangas, cumpliendo así una doble función.
Reubicación
Ayer, varios operarios municipales procedieron a desmontar el mobiliario urbano situado frente a la Casa da Bola para dejar libre el espacio donde ubicar la nueva oficina de la alcaldía. La proximidad del edificio municipal que alberga, entre otras dependencias, la oficina de turismo, facilitaría su conexión a los servicios básicos. Sin embargo, una vez instalada la caseta con un camión grúa los representantes municipales decidieron que la ubicación no era la idónea y optaron por desplazarla unos metros para acercarla a la oficina central de Novagalicia Banco. El traslado estaba previsto para hoy a las seis de la mañana, antes de la llegada de los comerciantes al mercadillo. Luego se procederá a la limpieza y acondicionamiento del habitáculo, así como a instalar el mobiliario necesario para atender a los afectados y celebrar la junta de portavoces, prevista para la una y media de la tarde.
