La Dirección Xeral de Patrimonio Cultural de la Xunta de Galicia opta por conservar el astillero de Purro y lo incorporará como una sala anexa al Museo Massó. Ésa es la decisión que el departamento autonómico hizo pública ayer después de años sin adoptar un pronunciamiento claro sobre la única carpintería de ribeira existente en la Ría de Pontevedra.
Patrimonio iniciará el procedimiento de inclusión del astillero en el Inventario Xeral do Patrimonio Cultural de Galicia, lo que permitirá su protección, recuperación y puesta en valor "como oferta complementaria para el Museo Massó y atractivo turístico para la villa". La Xunta argumenta su postura en el informe técnico elaborado por la delegación provincial de Pontevedra, por la dirección del Museo Massó y por los comunicados de varios colectivos locales apoyando la catalogación, "por su interés científico, cultural y social".
Una vez iniciado el trámite de inclusión en el inventario, se establecerá un área de protección de 50 metros desde los elementos más exteriores. Asimismo, se ordenará una anotación preventiva en el inventario y se abrirá un periodo de información pública durante 20 días a partir de su publicación en el Diario Oficial de Galicia. Por último, se establecerán las medidas cautelares provisionales para garantizar su seguridad y evitar el deterioro de la estructura.
La idea es que el Museo Massó potencie la antigua carpintería de ribeira incorporándola como un centro anexo a sus instalaciones. De este modo, la sede del Museo centrará su discurso expositivo centrado en la fábrica de conservas, mientras que en el anexo del antiguo astillero se hará referencia a aquellas actividades que muestran la relación directa del hombre con el mar. Acogerá, pues, la exposición de la colección de herramientas de carpintería de ribeira y las embarcaciones tradicionales en su contexto original, y también podrá albergar actividades didácticas con escolares.
El objetivo último es que los alumnos puedan conocer cómo es una carpintería de ribeira, cómo se construían las embarcaciones de pesca tradicionales, y cómo se elaboraban las bateas y las redes. El nuevo museo documentará y conservará el pasado pero también lo confrontará con el presente.
Patrimonio reconoce que el astillero está "íntimamente ligado a la memoria colectiva de Bueu" y que su principal valor reside en ser el único testimonio vivo de una actividad que dominó las costas gallegas y que llegó a contar en su momento con un centenar de carpinterías en la Ría de Pontevedra.
