Moaña tendrá Plan Xeral de Ordenación Municipal en el horizonte de febrero de 2011. Ésa es al menos la previsión con la que trabaja el concello después de que ayer la empresa redactora, Arteplan Galicia, le hiciese entrega del texto refundido del documento de cara a su aprobación definitiva. Representantes de los cuatro grupos políticos de la corporación se reunieron con el arquitecto redactor, Manuel Freijeiro, quien les explicó de primera mano las modificaciones que han sido incluidas en el PXOM, y que no son sino las que habían sido requeridas por la Dirección Xeral de Patrimonio y por Costas del Estado en sus anteriores informes.

El primer paso de cara a esa aprobación definitiva será el pleno extraordinario que se ha convocado para el próximo jueve, día 5 de agosto, a las 13 horas y en el que, salvo sorpresa, habrá consenso a la hora de respaldar este nuevo texto refundido. Previamente, el martes habrá una comisión extraordinaria de Urbanismo para aclarar todas las cuestiones que sean necesarias después de que los grupos políticos hayan estudiado con mayor profundidad el documento.

Uno de los datos más significativos que contempla el Plan Xeral tras las modificaciones incluidas es el referente a la capacidad residencial, que se reducida de forma importante. De este modo, de los 2,75 millones de metros cuadrados de superficie destinada a viviendas se pasa a contar con 2,4. O lo que es lo mismo, de las 13.772 viviendas previstas inicialmente se pasa a 12.032. De éstas, 7.875 ya están edificadas, por lo que el margen de crecimiento contemplado por el Plan es de 4.157 viviendas (2.177 a realizar con el planeamiento secundario y 1.965 de licencia directa).

El Plan también se adapta al requerimiento de que la media de edificación en la llamada zoona de influencia de costa (los 500 metros desde la línea de costa) tiene que ser igual o inferior a la media de los suelos urbanizables en todos los concellos. Esto no se cumplía en la anterior versión del documento, ya que en él el cómputo se hacía incluyendo los suelos urbanizables no consolidados, algo que no aceptó la Xunta. La cuestión era problemática, toda vez que la gran mayoría del suelo urbanizable de Moaña son bolsas con parte de terreno en zona de influencia de costa y con parte fuera de ella. La fórmula por la que se ha apostado es la de concentrar el grueso de la edificabilidad por encima de esa línea de los 500 metros. La idea es vista con buenos ojos desde Costas, que, no obstante, desea analizar el documento antes de darle su placet.

La Dirección Xeral de Patrimonio, por su parte, había requerido rehacer prácticamente la totalidad del catálogo de yacimientos a proteger. Éste ha sido uno de los trabajos más minuciosos llevados a cabo en los últimos meses. De hecho, antes ocupaba un volumen y ahora ocupa dos. El resultado es la revisión de todas las fichas para rehacerlas en un formato más pormenorizado, además de incluir 40 fichas nuevas y otras cuatro que ya estaban catalogadas en las Normas Subsidiarias pero que no habían sido localizadas en su día. También se ha cumplido con la ejecución de un estudio pormenorizado de los núcleos rurales de especial protección para indicar qué tipo de protección requiere cada uno de ellos.

Finalmente, y también para cumplir con lo que se había acordado en el pleno de agosto de 2009, en el que se respaldaron las modificaciones requeridas por la Dirección Xeral de Urbanismo, se ha incluido un volumen de justificación del futuro polígono industrial de Cruz da Maceira, que ocupará 435.538 metros cuadrados.