El concejal de Urbanismo del Concello de Cangas, Mariano Abalo (ACE), presentó el pasado día 12 de marzo un recurso contencioso administrativo contra la aprobación definitiva por parte de la Junta de Gobierno del proyecto de compensación del polígono 1 de la Unidad de Actuación Número 5, en la zona de Altamira. El proyecto supone la construcción de alrededor de 350 viviendas y abarca una superficie de 35.000 metros cuadrados, con una inversión prevista de alrededor de 19 millones de euros.

Mariano Abalo basa su demanda en el recurso de reposición interpuesto en agosto de 2008 ante el Concello de Cangas. Cumple así la advertencia que hizo en aquel momento, ya que cuando presentó el recurso de reposición declaró públicamente que “en cierta manera se inicia la vía judicial”. La demanda la interpone Mariano Abalo como miembro de la Junta de Gobierno a la que demanda y portavoz del grupo municipal Alternativa Canguesa de Esquerdas (ACE). En su escrito de demanda insiste en considerar ilegal y “gravemente perxudicial a citada aprobación definitiva do proxecto de compensación do polígono 1 da Unidade de Actuación Número 5”.

Mariano Abalo aseguraba en su recurso de reposición que se incumple una serie de mandatos legales y que hay una considerable merma de los derechos municipales en relación con la equidistribución del polígono UA-5, afectando al interés general. Pero también se refiere al PERI (Plan de Reforma Interior) de esta urbanización aprobado en enero de 2007. Abalo sostiene que incurre en varios motivos de nulidad, como alterar el sistema viario de la Normas Subsidiarias al modificar los viales contemplados en las mismas o no reservar suelo suficiente para viviendas de protección oficial. También asegura que incumple la Ley de los 500 metros. Insiste en su recurso en la responsabilidad patrimonial de los miembros de la Junta de Gobierno y de la corporación municipal.

Fue la Junta de Gobierno del 16 de julio de 2008 la que aprobó el proyecto de compensación de la UA-5, con el voto afirmativo del PSOE, la abstención del BNG y el voto en contra de ACE. En ese momento, los socialistas criticaron el “paso atrás” dado por el BNG, ya que había anunciado su apoyo al proyecto por existir dos informes técnicos contradictorios: el del jefe de Urbanismo, favorable; y el del arquitecto municipal, desfavorable. El PSOE incluso llegó a manifestar que había que replantearse el pacto.

Cabe señalar que el recurso de reposición está todavía sin contestar. Los socios de gobierno de Mariano Abalo consideran que los recursos judiciales debieron de producirse en su momento, cuando el PP aprobó el PERI, no ahora.De momento, ni el BNG ni el PSOE están dispuestos a pronunciarse sobre este asunto. Tampoco habló Mariano Abalo. El silencio es absoluto, conscientes todos de que este contencioso podría volver a dividir al gobierno tripartito, justo en uno de las mejores momentos del mismo, cuando parecía que se habían cerrado filas tras la la derrota electoral del bipartito en las elecciones autonómicas. De hecho, el propio Abalo habló de la necesidad de abundar en el consenso y fortalecer la unión del tripartito. Sí parece confirmarse que Abalo no anunció de sus intenciones a sus socios de gobierno.