El portavoz del Partido Popular de Bueu, José Barreiro, criticó ayer el importante descenso de denuncias urbanísticas producida en el primer trimestre del año en comparación con las cifras del ejercicio anterior. Según Barreiro el número de denuncias se redujo a la mitad, algo que no se debe, señala, al mayor cumplimiento de la legalidad, sino a la falta de medios humanos con la que debe trabajar la Policía Local.
“Antes había un agente especializado en esta labor, pero ahora se le retiró de este servicio porque entendemos que no hay dotación suficiente y ese trabajo lo hacen entre todos”, señala. El portavoz del PP subraya que “lo que se ha creado es un totum revolutum porque no todos los agentes conocen la realidad de las obras. La especialización era buena”.
Los populares aseguran que las denuncias que se producen “se quedan en meras denuncias. La Policía Local hace su informe pero ya no se mueven más papeles”. Este modo de proceder, se pregunta José Barreiro, ¿acaso obedece a que el BNG tiene algo que ocultar o es porque si sanciona a uno se crearía un agravio comparativo y debería sancionar a otros?”.
Asimismo, Barreiro hizo referencia a las palabras del regidor buenense, Félix Juncal, en el último pleno, “en el que dijo no entender alguna sentencia judicial que obligaba al concello a derribar una construcción”, en referencia a un edificio en Loureiro. El portavoz popular asegura que “sólo faltaba que Félix Juncal, que hasta donde yo sé no acabó la carrera de Derecho, venga a enmendar la plana a los jueces”.
Por último, contestó a la edil Laura Ogando y señaló que primar la contratación de buenenses en las obras del Plan ZP “no es demagogia. Y no se trata de discriminación, sino de desigualdad, que se permite en determinadas situaciones, como en planes municipales”.
