No es fácil encontrar a alguien que quiera hablar de esa situación y quien lo hace prefiere permanecer en el más absoluto anonimato. Comenta un veterano marinero que es más habitual de lo que parece abandonar a la familia con la que vivía y crear otra en la costa sudafricana, las Malvinas o Sudamérica. Comenta que es muy raro que esos marineros regresen. "Acostumbran a hacer su nueva vida allí, y aquí, si regresan, lo hacen por algún tema de herencias, pero sin que se entere demasiada gente. Cortan absolutamente con todo. En Chile, en los años 89 y 90, en unas mareas experimentales, el 80% de la tripulación quedó allí, sin exagerar. Pero me refiero tanto a patronos de 50 años como a marineros jóvenes".

Este tipo de abandonos trae a la mujer tantos o más problemas que cuando no existía la ley del divorcio. Comenta la responsable del CIM de Moaña que la mujer se encuentra muchas veces indefensa ante la situación. "Si está fuera, lo importante es notificar la demanda de divorcio, pero para eso hay que localizarlo antes. Ellos no acostumbran a ponerse en contacto con la familia de aquí, así que hay que realizar la búsqueda a través de los consulados, que no siempre es fácil".

Al estar trabajando en una marea, demostrar el abandono de hogar es más difícil. La responsable del CIM recomienda que al pasar un mes sin ninguna noticia del marido, se inicien ya los trámites. Y es que no sólo se van ellos, sino que desde el extranjero se le revocan a la mujer los poderes que tenían para operar financieramente, lo que deja a la esposa en una clara indefensión. "Hay que darse cuenta que en España, a todos los efectos, permanece casado, por lo que la mujer no puede acceder a cualquier percepción económica a la que tendría derecho por su nuevo estado". Comenta la responsable del CIM que no son habituales los casos en los que el hombre abandona el hogar y se hace cargo de los gastos que suponen el sustento de la esposa y de los hijos.

Otra dificultad que señalan los expertos en el trámite de divorcio, además de dar con el paradero, es acceder a la nómina. Con frecuencia, cambian de empresa y trabajan en barcos de bandera de conveniencia, por lo que el embargo de las nóminas es casi imposible.

Silencio

Tampoco hay estadísticas para poner encima de la mesa, pero hay más casos de los que uno pudiera imaginar. Esta Redacción trató de ponerse en contacto con una morracense que en estos momentos se encuentra en proceso de divorcio y que lleva ya un año sin saber nada de su marido. La familia le recomendó el silencio y el recato, pese al dolor que causa la situación

Por compañeros se sabe que las mujeres con las que deciden estos marineros cambiar de vida pertenecen a un extracto social bajo y lo normal es que las hayan conocido ya después de años de relación, aunque el caso de Chile pone al descubierto que no hace falta mucho tiempo para que sucedan cosas así.

La adaptación a las costumbres de los países donde deciden montar su nueva vida es buena. No les falta trabajo en barcos de bandera de convenencia o empresas de capital mixto y viven sin mirar al pasado. Volver se hace cada año más duro. La costa africana es la elegida ahora para desembarcar. y crear fundar otra familia.