Los vecinos de O Morrazo tomaron ayer los cementerios de la comarca para honrar en el día de Todos los Santos a familiares y amigos fallecidos. Durante toda la jornada, los camposantos recibieron un goteo constante de personas provistas de adornos florales para engalanar las tumbas de sus seres queridos.

La mayor afluencia de gente coincidió con la salida de los oficios religiosos, aunque no se registraron retenciones de importancia. Las Policías Locales de Moaña y_Bueu diseñaron un operativo especial para ordenar el tráfico en los cementerios. En Cangas no hizo falta porque la calle San Xosé -donde se encuentra el camposanto del centro urbano- ya es de sentido único. Donde sí fue necesario adoptar esta medida fue en el de Coiro.

En Moaña, cuatro agentes formaron el despliegue en los accesos al cementerio municipal de Abelendo. La mayor concentración de visitantes se produjo entre las 16.30 y las 17.30 horas, coincidiendo con la finalización de la misa.

El operativo policial en Bueu fue el más completo de la comarca. Participó casi toda la plantilla -unos 12 agentes- e incluyó los cementerios de Bueu, Cela y Beluso. En este último fue donde más tráfico se concentró debido a la celebración de un entierro. En el de Cela se señalizó la zona de aparcamiento y en los otros dos se habilitó la dirección única. Los agentes detectaron menor afluencia de gente que en años anteriores y lo achacaron a que el viernes acompañó la meteorología, situación que fue aprovechada por muchas personas para adelantarse a la celebración. Las concentraciones se repetirán hoy, Día de Difuntos.

Todos los Santos es una solemnidad cristiana instituida en honor de todos los santos por el papa Urbano IV para compensar cualquier falta por parte de los fieles a las fiestas de los santos durante el año. En los países de tradición católica se celebra el 1 de noviembre para venerar a los santos que no tienen fiesta propia en el calendario litúrgico.