Los dueños de las embarcaciones varadas o amarradas en zona de baño de la playa de Vilariño serán multadas por Costas y Capitanía Marítima si no se retiran de los espacios delimitados. Un inspector del Ministerio de Medio Ambiente recorrió en los últimos días este tramo del litoral para elaborar un informe de la situación y remitirlo a los responsables del departamento, tras ser requerido para ello por la concejala de Turismo, Mercedes Giráldez, en respuesta a las demandas vecinales. La edil también tiene previsto reunirse mañana con el capitán marítimo para que tome medidas en el mismo sentido.

La ocupación de la zona de tránsito por las embarcaciones tradicionales es una situación que viene de años atrás y que se visualiza más en verano por la afluencia de bañistas que encuentran dificultades para el paseo por la arena o las zambullidas en el mar, debido a la presencia de cabos y razones, explica Giráldez, que tiene también solicitada una entrevista con la jefa provincial de Costas, Cristina Paz Curbera, de la que aún no ha obtenido respuesta. Además, el personal de vigilancia municipal está elaborando un listado de barcos en esa situación para notificar a sus dueños la solicitud de retirada, si bien el concello no tiene competencias sancionadoras.

Los cabos en la playa contribuyeron a la pérdida de la bandera azul en Vilariño y provoca quejas de la asociación de vecinos Pedra Amarrada, cuya directiva incluyó este punto en una reunión que mantuvo ayer con la alcaldesa para analizar los problemas en la zona y sus posibles soluciones.