El informe de la Estación Fitopatolóxica do Areeiro, en Lourizán, sobre las causas que están deteriorando los pinos mansos del atrio de San Roque, ha llevado al concello a tomar medidas inmediatas, que comenzarán a aplicarse el lunes. Tras pedir varios presupuestos, los trabajos se han adjudicado al especialista Faustino Meis, de la empresa Arbogal, por 3.727 euros. La actuación consiste en la poda de la parte seca de estos ejemplares, con personal cualificado para trabajos en altura; la colocación de trampas con feromonas de agregación que indicarán el momento apropiado para realizar el tratamiento insecticida; y finalmente, el saneamiento del suelo realizando una aireación y posterior aporte de un complejo activador en ambos ejemplares para favorecer su estado fitosanitario.

El concello ha optado por aprovechar la situación para realizar una actuación integral que contempla también el anclaje de las ramas con un sistema, denominado "cobra" que las asegure y mantenga su estabilidad al ser objeto de una poda importante. Asimismo, se incluye el tratamiento del suelo realizando la descompactación del mismo, el aporte de madera biotriturada y la limpieza de ramas de los pinus pinea, siguiendo las instrucciones recomendadas por los técnicos de la estación de Lourizán y de la ingeniera técnica agrícola Alejandra Rey Quinteiro en un informe solicitado por el concello.

El primer ejemplar está "gravemente atacado" por Ips sexdentatus, un insecto consumidor de la madera que conducirá a la muerte del árbol si no se combate. En el segundo, con mejor apariencia exterior, se detectó Phellinus pini, un hongo de pudrición que indica "un ataque bastante avanzado", según el informe, y que también se pretende erradicar con el tratamiento previsto.