Lalín se queda, definitivamente, sin festejos patronales. La comisión municipal de la Covid-19 acordó "suspender cualquier tipo de evento festivo relacionado con las fiestas de la Virxe das Dores y no autorizar ninguna petición de celebración o actividad que suponga un incremento de la concentración de gente en ningún punto del casco urbano". La decisión fue adoptada por unanimidad de los asistentes ante los potenciales riesgos que en la situación actual de restricciones debido a los rebrotes de coronavirus pueden suponer para la población lalinense, máxime después de comprobar lo ocurrido en alguna población vecina.

En el encuentro, celebrado el lunes sin la presencia de las médicas del centro de salud por cuestiones profesionales, también se acordó trasladar a la Xunta de Galicia la petición de una nueva valoración de los aforos de las terrazas, que ahora están al 75%. Dependiendo de la evolución de los rebrotes podrían quedar al 50% de capacidad para aumentar las distancias sociales entre los clientes y, de esta manera, ganar en seguridad para los usuarios.

Comisión y gobierno decidieron, asimismo, la reducción de las ferias del 3 y del 18, mientras se mantengan las limitaciones motivadas por la situación de los rebrotes y ordenadas por la Xunta. De este modo, en las próximas citas quincenales solo se permitirá la asistencia de puestos de productos de primera necesidad, básicamente los de alimentación y plantas, con el fin de que guarden las máximas distancias y permitan a los clientes moverse respetando las medidas de seguridad sanitaria.

Con el mismo criterio, se mantiene el funcionamiento del mercadillo de los sábados, al ser de productos de primera necesidad. Además, desde el gobierno se subraya que los vendedores "vienen cumpliendo sobradamente" las recomendaciones de limitación de espacios impuestas por mor de la pandemia.

Por último, la comisión acordó continuar con las tareas de desinfección que se están acometiendo tanto en los colegios como en las calles y los puntos de alto tránsito del casco urbano como una forma de "mantenerlos lo más limpios posible" y también a modo de "concienciación de la ciudadanía" ante la situación que se está viviendo.

También en la jornada del lunes, el alcalde, José Crespo, y la concejala Eva Montoto participaron en una reunión a varias bandas con el nuevo conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, responsables de Sanidad del Sergas y regidores del área sanitaria de Santiago de Compostela, como los de la propia capital, Ames o Teo. Pusieron en común la situación de los distintos ayuntamientos y evaluaron los datos de los rebrotes. Estos encuentros se irán celebrando periódicamente para abordar las medidas que se están tomando.

La situación epidemiológica de los municipios del área sanitaria de Santiago será revisada hoy en una reunión técnica y en una subcomisión el viernes, al término de las cuales se trasladará a los ayuntamientos su situación respecto a las restricciones. Teniendo en cuenta este calendario y el hecho de que este viernes será el último día laborable antes de los festivos locales de la próxima semana, la comisión municipal de la Covid-19 se reunirá de nuevo esa jornada para analizar la situación y, si fuese el caso, adoptar nuevas medidas complementarias. Crespo incide en "el alto índice de transmisibilidad" que se da en Lalín, pues cada contagiado traslada el virus a dos personas, cuando lo normal es que sea a una.