Progenitores con alumnos en el CEIP Xesús Golmar alertan de los problemas que tienen para conciliar las familias que tienen varios hijos con edades diferentes. En función del curso, los niños emplean uno u otro acceso al centro para entrar y salir del mismo, de modo que un solo adulto no basta para acompañar a los vástagos en caso de que tengan que usar entradas distintas, sino que han de acudir dos, sean el padre y la madre u otras personas autorizadas. Apuntan también que el acceso para los niños de 4 años se hace por escaleras bastante pronunciadas, que deben sortear sin sus progenitores, puesto que no pueden entrar al recinto. Los padres temen que los niños caigan o que puedan contraer algún riesgo de contagio porque tienen que agarrarse al pasamanos, que también tocan otros alumnos.

Ante esta situación, hay progenitores que instan a la Xunta a que priorice la salud sobre la enseñanza, y que invierta en tablets y ordenadores para que los niños puedan seguir sus clases desde casa. Añaden que estos instrumentos incluso son más baratos que los libros de texto en papel. Piden dignidad tanto para los niños y los profesores como para las propias familias, en un momento en que sí se reducen aforos en otras áreas.

El CEIP Xesús Golmar es uno de los afectados por el positivo en coronavirus de una acompañante del transporte escolar. La mujer cubre también una línea del CEIP Vicente Arias de la Maza, de Vilatuxe. Por precaución, quedaron confinados los niños de ambos colegios que los pasados jueves y viernes viajaron con esta auxiliar y el conductor (que está también confinado). En el caso de Vilatuxe, son catorce los chavales afectados que han tenido que ausentarse de las clases por haber compartido bus con la enferma. La Consellería de Sanidade estableció la cuarentena durante un período que podría llegar a las dos semanas, después de la comunicación que hizo la propia acompañante del transporte y ambos centros. Los estudiantes están confinados en sus casas y a la espera de someterse a las pruebas PCR, lo que ha causado cierta alarma entre algunos de sus compañeros de centro.