| Numerosos amigos del abogado lalinense Luis Benjamín González Rodríguez acompañaron ayer a su familia en el funeral por el abogado fallecido mientras pescaba en el río Miño, en Ourense, en principio, a consecuencia de un infarto. Pese a las condiciones impuestas por la pandemia sanitaria, centenares de personas pasaron por la capilla ardiente instalada en el tanatorio O Deza de A Romea, desde donde salieron los restos mortales del letrado para la celebración del funeral en la iglesia de As Dores. El féretro fue portado al interior del templo por sus hermanos y alguno de los sobrinos del finado, una persona muy querida, también entre la familia de pescadores de la comarca.
