Desde hoy pymes y autónomos de Lalín podrán acceder a las ventajas para la obtención de crédito con entidades bancarias, un plan municipal mediante el que el Concello destina 100.000 euros para asumir todos los gastos derivados de la formalización de los préstamos. Es decir, el beneficiario solo tendrá que hacer frente a la devolución del importe autorizado por la sucursal bancaria que elija y, con estos avales municipales se estima que podrá llegar en torno a un millón de euros a los negocios y así poder mantener su actividad en plena crisis provocada por la pandemia sanitaria.

El acuerdo fue rubricado ayer en el consistorio por el alcalde, José Crespo; el presidente de la Asociación de Empresarios de Deza (AED) y representantes de las dos sociedades de garantía recíproca implicadas en el convenio: Iberaval y Sogapro. Los emprendedores podrán solicitar préstamos de entre 20.000 y 25.000 euros para paliar las consecuencias de esta crisis económica. El mandatario, en presencia de representantes de los partidos de la oposición, les agradeció su colaboración en todas aquellas medidas económicas enmarcadas en el plan Lalín por Vir y dijo que esta en concreto, la de hacer llegar liquidez a comercios, pequeñas empresas o autónomos es quizá con la que más satisfecho está porque favorece la actividad económica y, en consecuencia, el mantenimiento del empleo. A su juicio, estas medidas económicas debían partir de administraciones superiores, aunque en todo caso insistió en que aquí el Concello dio un paso al frente para auxiliar a aquellos que podrían tener dificultades. Así, a diferencia, dijo, de las ayudas directas también en marcha de 300 ó 1.000 euros para negocios que cerraron durante el estado de alarma o vieron recortados sus ingresos, estos avales tienen una utilidad manifiesta.

Del éxito de esta convocatoria dependerá que se retomen más adelante, incluyendo ya una partida económica específica en los presupuestos municipales. De todos modos Crespo dejó caer que será preciso realizar algunas modificaciones en las bases, porque con este modelo es la administración local "la que asume todo". Por último, pidió a los representantes de las sociedades de garantía que agilizasen al máximo las preceptivas tramitaciones para que el dinero pudiese llegar con la mayor premura posible a las empresas. Y recordó que esta idea había partido de Lamas, al tiempo que agradeció la labor de la secretaria técnica de la patronal, Chus García.

Alberto Alonso, (Sogarpo) aventuró que los fondos municipales serán insuficientes por la necesidad de liquidez de las empresas, felicitó al Concello por la iniciativa de poner en marcha "una herramienta útil para salir adelante dentro de una situación tan complicada". El representante de Iberaval Pedro Pisonero se pronunció en términos semejantes y añadió que de la dura crisis de hace ahora algo más de una década se salió a duras penas por las dificultades de las empresas de obtener liquidez, algo que ahora no acontece. Citó las líneas ICO impulsadas por el Estado, pero dijo que serán insuficientes en poco tiempo, de ahí la trascendencia de activar medidas concretas como la de la administración dezana. "El ayuntamiento va a gastar el 5 por ciento de los fondos que podrán conseguir las empresas", apostilló.

Lamas recordó que aunque la institución que preside será la encargada de gestionar el asesoramiento a los potenciales beneficiarios, estas líneas de microcréditos municipales son accesibles a todos los que lo soliciten, sean o no asociados de la patronal comarcal. El dirigente de la AED pidió a los representantes de las sociedades de garantía recíproca que no solo se moviesen en criterios de solvencia sino que pensasen que detrás de cada futura solicitud hay un proyecto emprendedor y unas personas que tratan de salir adelante y generar empleo. También aludió al escaso índice de morosidad que hay en la zona y confió en el éxito de una convocatoria que, apuntó el como el mandatario local, debería extenderse en el tiempo por su importancia para los agentes económicos.