El presidente del Partido Popular de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, pidió ayer en Lalín acudir a las urnas porque "la abstención es un voto directo al multipartito". "Si el 12 de julio no votamos, saldremos perdiendo todos los gallegos", advirtió, en un multitudinario acto celebrado en la Carballeira do Rodo, en el que también participaron la diputada Ana Pastor y los lalinenses Román Rodríguez -candidato y conselleiro de Cultura e Turismo-, Cristina Pichel -directora xeral de Xuventude- y el alcalde José Crespo.

Feijóo resaltó que "no se puede dar nada por hecho" y que las victorias no se logran con encuestas ni esperando a que sucedan, sino yendo a por ellas: pidiendo el voto y votando. "No dejemos de votar por más seguros que estemos de cuál va a ser el resultado ni de cuál es el resultado que Galicia precisa", subrayó el candidato a la reelección. Conminó a los presentes a pedir el voto también a quienes no votaron a los populares en otras elecciones y que no están de acuerdo con un gobierno "multipartito".

Después de incidir en la importancia de que los gallegos se unan en las urnas para avanzar juntos y evitar la fragmentación y "la parálisis", el presidente defendió "no hipotecar cuatro años de Galicia, de recuperación, de progreso y de bienestar por un día de relajación". En este sentido, reiteró que del próximo domingo depende la Galicia de 2024, por lo que pidió el voto para que "nuestra comunidad gane".

"A pesar de que superamos lo peor de la pandemia, el virus sigue ahí y hay que seguir gestionando este problema con seriedad, con experiencia y con respuestas coordinadas", manifestó Feijóo. No pasó por alto que hay que enfrentarse a las consecuencias económicas, laborales y sociales del coronavirus. "No hay margen para improvisar ni tiempo que perder", sentenció, al abogar por un gobierno "con programa y gestión acreditada que represente la experiencia", frente a "los experimentos".

El líder de los populares gallegos incidió en que un gobierno "para todos", de ahí la propuesta de "seguir trabajando juntos" durante los próximos cuatro años. Sostiene que la sanidad gallega fue la que mejor funcionó en esta pandemia y propone completar la renovación de los hospitales y los nuevos servicios puestos en marcha: "Queremos seguir gestionando y mejorando la sanidad pública gallega", porque, en sus palabras, "es lo más importante, nuestra prioridad".

De igual manera, aspira a que la educación pública -de la que dijo que obtiene "los mejores resultados de su historia" en el informe PISA- se supere; que el gobierno autonómico "que más apoya a las familias de España" siga aprobando nuevas medidas de respaldo a las madres y padres; multiplicar los servicios a los mayores; y que la Galicia "que recuperó por fin" el saldo migratorio positivo dé más oportunidades. Asimismo, quiere mantener la apuesta por sectores que considera "clave" como el rural o el mar.

Por último, Feijóo garantizó seguir trabajando por Lalín y puso en valor lo hecho en los últimos años, como la mejora de centros educativos, el incremento de plazas en escuelas infantiles, las ayudas a la dependencia o la finalización de las conexiones viarias hacia Ourense.