Un año después de su cierre, Silleda recupera su discoteca, de las pocas, si no la única, operativas en la comarca. Lo hace de la mano de Alberto Gómez Soldecasa con una convocatoria muy acorde a los tiempos que corren: una fiesta de mascarillas, con 50 euros de premio para la más original. Como si de un festival de Venecia se tratara, aunque en este caso lo esencial es que la máscara cumpla su función profiláctica cubriendo nariz y boca.
La histórica discoteca de Silleda cerró sus puertas en julio de 2019, entonces con otra gerencia. Ahora estrena etapa bajo la denominación Dilema by Solthehouse, traducción spanglish del apelativo de su promotor. Soldecasa es su lugar de origen en la parroquia de Escuadro y también su nombre de guerra como DJ. Actualmente regenta el bar O Berrinche y ya tuvo otros negocios de la movida nocturna en la localidad trasdezana. La nueva Dilema abrirá sus puertas todos los días, excepto los lunes, a las 23:00 horas, con permiso para continuar hasta las 6:00.
El establecimiento tiene una superficie de 350 metros cuadrados, incluidos pasillos, baños, barras y almacenes, con un aforo teórico de 400 personas. Pero las pautas sanitarias impuestas por la pandemia del Covid-19 dejan la concurrencia en un 75% en la barra y las mesas y en un 50% en la pista. Con todo, Soldecasa prefiere optar por la prudencia y apunta que no excederá el centenar de personas. La mascarilla será obligatoria para todos los clientes, cuyos datos se tomarán a la entrada por si hubiera un rebrote. "Ellos no tienen la obligación de darme los datos, pero yo sí tengo la obligación de pedírselos", declara el nuevo gerente de la discoteca. En su interior no faltarán dispensadores de gel hidroalcohólico ni cartelería informativa sobre las medidas de prevención del coronavirus.
Soldecasa pretende programar actuaciones de música y humor durante la semana para atraer clientela. "De momento no vamos a tener orquestas, pero sí grupos de rock, humoristas, monologuistas...", señala. Su intención es comenzar dando la oportunidad de actuar a los artistas y formaciones locales de música, aunque todavía no hay fechas cerradas. "Primero tengo que hablar con ellos para irnos organizando", alega el hostelero.
