Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Lalín pone en marcha unas rebajas de verano forzadas por el adelanto en áreas comerciales

Silleda, Vila de Cruces y A Estrada esperarán a principios de julio - Las dos primeras semanas de reapertura tras el confinamiento resultaron excelentes en ventas - El comercio "online" funcionó sobre todo en ropa infantil

Descuentos de hasta el 50% en una tienda de Lalín. // Bernabé/Javier Lalín

El cierre de las tiendas de ropa y calzado durante el estado de alarma provocó que las grandes marcas almacenasen un stock al que, en circunstancias normales, solían dar salida durante la propia temporada con los descuentos mid season. Así es que estas firmas tuvieron que adelantar a finales de junio las rebajas de primavera-verano, para poder despachar toda la producción. Ayer era la fecha oficial de inicio de las rebajas en varios centros comerciales, aunque algunas marcas llevan ya algunas semanas con estas ofertas.

Y claro, con esta competencia al pequeño comercio de las comarcas no le queda otra que adelantar también su periodo de rebajas, si no quiere presenciar una fuga de clientes hacia los centros comerciales de las ciudades más próximas. Es la decisión que ha tomado la mayoría de miembros de la Asociación de Empresarios de Deza (AED). Su responsable de Comercio, Meritxell Silva, explica que en estas primeras jornadas los descuentos girarán en torno al 20 o el 30% sobre el precio original, aunque algunos comercios lo elevan al 50% pero para aquellas prendas de temporadas anteriores. "El primer día [por ayer] es flojo en cuanto a ventas, porque muchos vecinos hicieron puente tras la festividad de San Juan y se marcharon a sus segundas residencias", explica Silva. Cree que, en líneas generales, estas rebajas van a ser flojas, por lo que poco ayudarán a una temporada que estuvo cercenada por la pandemia sanitaria.

Eso sí, desde la reapertura de los comercios, a mediados de mayo, el sector sí pudo notar el apoyo de la clientela a sus negocios. "Durante las tres primeras semanas sí se fue vendiendo", y además, el pasado fin de semana las tiendas del casco urbano así como del Centro Comercial Pontiñas ya aplicaron descuentos a sus clientes, para dinamizar las compras. Sin salir del casco urbano de Lalín, el colectivo D'Tendas esperará al 1 de julio para colgar sus carteles de rebajas. Inés Fariñas, la portavoz de la entidad, vaticina que este año los descuentos no van a poder ser muy grandes, dada la situación del sector: con casi dos meses sin actividad, tiene que enfrentarse sin embargo al pago de alquileres, recibos y mercancía. Fariñas apunta que, pese a que varios clientes se apuntaron en esta reapertura a realizar compras en negocios locales, otros prefieren aguardar para aprovechar esos descuentos.

Y es que "la gente tiene miedo a gastar, por lo que vendrá. Las dos primeras semanas de reapertura funcionaron muy bien, pero ahora el cliente adquiere solo lo que necesita", comenta Lupe Pampín, presidenta de la Asociación de Pequenos Empresarios e Comerciantes (APEC) de Vila de Cruces. Las tiendas de este casco urbano deciden, también, esperar a comienzos de julio "porque adelantar las rebajas no nos resulta tan beneficioso: las grandes marcas fabrican para ellas mismas, y pueden asumir pérdidas. Pero nosotros, no". Sí es cierto que en Vila de Cruces, cuando el comercio volvió a abrir sus puertas, algunos negocios optaron por descuentos del 10% o por regalar mascarillas con la compra. Pampín, al igual que Meritxell Silva, no se muestra muy esperanzada con las rebajas, "Los vecinos van a consumir lo justo, y uno de las áreas en la que van a ajustar gastos va a ser en la compra de ropa".

Vales descuento

Como vemos, una de las cuestiones en que coinciden los comerciantes es en el apoyo de sus clientes., ya sea fruto de las propias campañas de la administración local o de la concienciación de cada cual. Desde la Asociación de Comerciantes de A Estrada (ACOE), Jorge Fuentes admite que "hubo mucho movimiento durante las dos primeras semanas, pero en principio los vecinos continúan comprando en el pequeño comercio en vez de escaparse a las grandes superficies". Una forma de fidelizar a los clientes es la que desde hace año aplica ECOS, el colectivo de comerciantes de Silleda. Su campaña de verano contará una vez más con la entrega de rifas, sin compra mínima, para participar en el sorteo de vales descuento, que podrán canjearse en agosto. La entrega de rifas arranca hoy y permite optar a 10 vales de 50 euros, cinco de 100 y uno de 200. Su lema es "agora máis que nunca, aposta polo comercio local".

Decíamos que las grandes marcas fijan la tendencia. Las compras por internet son ya un clásico con las multinacionales. En el pequeño comercio local empiezan a asentarse. Pero a decir verdad, durante el estado de alarma sus ventas tuvieron más éxito entre aquellas tiendas especializadas en ropa infantil.

Compartir el artículo

stats