El centro Castrodeza, situado en el consistorio lalinense, retomó ayer su actividad con las medidas de seguridad e higiene exigidas. Los visitantes podrán realizar de nuevo un viaje en el tiempo y conocer cómo era la vida en las fortificaciones y acceder, bajo unas nuevas normas, a las herramientas digitales de este espacio de la Diputación provincial.