Entre los numerosos retos que pueden verse estos días en las redes sociales, el del colegio María Inmaculada, de Silleda, destaca por su originalidad. El centro educativo propuso a estudiantes y profesores recrear en su casa, con la mayor fidelidad posible, un cuadro. Así que todos echaron mano del atrezzo, ya sea un gorro de paja para parecerse a Van Gogh en el famoso autorretrato que pintó en 1887 (y que, por cierto, tan bien representó el recién fallecido Kirk Douglas en El loco del pelo rojo), como de la mascota de la casa para recrear a Miss Bowles con su perro, la obra de Joshuah Reynolds.
En este reto valen cuadros de cualquier estilo, lo importante es aprender bien todos los detalles, como esa forma de mirar que tenía La joven de la perla, de Johannes Vermeer, o la angustia que transmite ese rostro apenas esbozado de El grito, la obra más conocida de Edvar Munch. Pero el reto intenta, sobre todo, divertir a los más pequeños, así que es normal que esta propuesta tenga como protagonistas a jóvenes que años, o siglos atrás, posaron para grandes pinceles, como La niña y la naranja, del español Julio Romero de Torres, La niña triste, del pintor contemporáneo Dorian Flórez. Pintura de hoy que convive con las entrañables Bailarinas, de Edgar Degas. El pintor francés fue anterior al movimiento impresionista, del que tenemos un buen referente en este reto, con de la Niña leyendo, de Auguste Renoir. Y también hay espacio para mujeres pintoras, con el autorretrato de Frida Kahlo.
