El Día del Libro se celebró coma cada año el 23 de abril, pero en esta ocasión de un modo peculiar debido al confinamiento causado por el coronavirus. Esta situación provocó que en esa jornada apenas hubo diferencia en la venta de libros tal y como constatan librerías y papelerías de la comarca dezana que ahora solo abren sus puertas por las mañanas.
Durante los primeros días del confinamiento registraron importantes ventas de libros de lectura obligatoria impuesta por parte de los institutos, pero ahora tal como indican desde las librerías lalinenses Dalvi y Raíces en los últimos días ya no venden de ese tipo de libros debido a que ha empezado ahora la tercera evaluación y debido a la incertidumbre de qué pasará con este curso académico, de si el alumnado volverá o no a las aulas. "La venta de libros, sobre todo de novelas, se animó algo en este tiempo, pero la cosa está muy floja y el Día del Libro se vendió algo más con respecto a jornadas anteriores, pero nada que ver con las cantidades de otros años", indica Tito González, de la papelería Dalvi. Beatriz García, de la librería Raíces, indica que sobre todo en este tiempo se están despachando libros infantiles y de adulto y entre ellos de bolsillo para la gente mayor y también constata que anteayer las ventas tampoco fueron destacadas.
Además, desde las librerías señalan que solo reciben aquel material que solicitan y las novedades editoriales, que llegaban cada semana, ya no cuentan con ellas. "Tampoco las pides porque no quieres acumular más sin saber cuando terminará esta situación", recalca García.
Ante la ligera venta de libros, los que está compensando estos más de 40 días es la cantidad de fotocopias que están haciendo debido a las tareas escolares. "Se incrementó mucho el número de fotocopias debido a que los profesores le suben las tareas en la página y en el campus virtual y eso sí que se nota mucho", apunta González. En esto también coincide Beatriz García. "En casa muchos no tienen impresora, a otros ya se les acabó la tinta y no tienen en donde comprarla por ello estamos haciendo muchas fotocopias". Desde la librería Raíces señalan que además de fotocopias, se está vendiendo muchos pasatiempos, como los autodefinidos y las sopas de letras, y todo tipo de material para hacer manualidades: cartulinas, goma eva, acuarelas, pinturas... para que los niños en casa estén entretenidos.
Por otro lado, el Club de la Lectura de A Estrada está inmerso en distintas actividades en la Semana del Libro. Para celebrar este día lanza dos propuestas: la lectura colectiva grabada en vídeo por las usuarias de este club de O Principiño, de Antoine de Saint-Exupéry que se puede ver en el perfil de Facebook Lendo AEstrada. Y los interesados pueden enviar sus vídeos recomendaciones del libro favorito a través del WhatsApp del 654 955 910. Solo tienen que aportar su nombre de pila, el título y el autor junto al vídeo. Además, el club anima a participar en las reuniones lectoras a través de Zoom y para ello, solo necesitan contactar vía WhatsApp o Facebook. El club facilitará la lectura vigente del grupo en el que quiera participar y los horarios además del enlace de acceso.
También el CEIP de O Foxo ha optado por el vídeo como arma más eficaz para poder celebrar el Día do Libro pese al confinamiento domiciliario. Niños, profesores y personal no docente grabaron en vídeo sus recomendaciones lectoras. La elevada participación motivó que el cortometraje realizado - Os do CEIP do Foxo lemos na casa- se dividiese en tres entregas, que vieron la luz en los tres últimos días. Las tres están colgadas en la página de la biblioteca del centro, O Portelo de Fuxú. Y animan a evadirse del confinamiento haciendo uso de la lectura.
