El BNG dezano plantea a los concellos que destinen parte de sus ingresos a la reactivación de la economía, afectada ya por la pandemia. También defiende la modificación de ordenanzas fiscales para rebajar tasas, precios públicos y tributos a personas y negocios damnificados. Urge, además, un plan de recuperación del comercio de proximidad, ferias y mercados tradicionales, para atajar la competencia de la venta por Internet. Para poder acometer estos gastos considera que es preciso derogar la normativa estatal de estabilidad financiera que atenaza a los concellos.