A Estrada tiene el casco puesto. La capital estradense está en reformas, aunque no lo parezca. Con la alameda municipal ampliada y reformada comenzó el cambio de la fisonomía urbana, que promete continuar hasta transformar una de las zonas más céntricas de la villa. El siguiente paso apunta hacia una próxima peatonalización de tramos de las calles Iryda y Justo Martínez. Y con ello, llega el momento de que la milla de oro -hasta ahora centrada en la calle Calvo Sotelo- se expanda.
Los aplausos a esta iniciativa, recogida en el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) y que el gobierno local desearía activar este mismo año, llegan desde distintos ámbitos. El denominador común es el vaticinio de una potenciación de este entorno como zona comercial, en especial para la Rúa Iryda, aprovechando el cómodo tránsito de peatones y el frente hacia la alameda. Estos atributos, además de brindar una armónica composición como zona residencial, hacen que muchos piensen ya en el florecer de negocios ligados al ocio y la hostelería, si bien también hay quien observa en este primer entorno peatonal una piedra de toque para que el ejemplo cunda y llegue hasta la calle Calvo Sotelo, ahora semipeatonal.
El presidente de la Asociación de Comerciantes da Estrada (ACOE), Alfredo González, recordó ayer que este colectivo fue la primera entidad en solicitar públicamente este proceso de peatonalización, una cuestión que el gobierno local había reconocido como la segunda fase del propio proyecto de reforma de los jardines municipales. "Va a haber un antes y un después de esto", auguró González. Para el dirigente de la asociación de comerciantes la apuesta podría incluso subirse a través de la peatonalización del tramo de la calle Castelao con frente a la alameda, si bien no dejó de reconocer que ello podría ser complejo a nivel circulatorio.
Desde la ACOE se aplaude abiertamente la iniciativa, remarcando que será una oportunidad para unir todo este entorno con la calle comercial y de servicios por excelencia de A Estrada, la Rúa Calvo Sotelo, a través de galerías comerciales. Se entiende que esta cuestión podría ser también un revulsivo para estos espacios.
En cuanto al aparcamiento, aunque la zona azul será eliminada en el tramo de Justo Martínez que va desde Calvo Sotelo hasta la Praza da Constitución y en el trecho de Iryda que parte de esta hasta Castelao, el presidente de la asociación de comerciantes apuntó a que nace un nuevo modelo, que dejaría el estacionamiento "al lado izquierdo" de la villa, hacia la Avenida Benito Vigo. "La calle buena va a ser Iryda dentro de unos años", consideró González, que reconoció que los alquileres ya son elevados en estos momentos. Insistió en que A Estrada es un sitio de paso y que la creación de unos soportales en todo el frente de Iryda ofrecería un lugar idóneo para negocios como heladerías, pastelerías o cafeterías, aprovechando toda la superficie de esparcimiento que se abre hacia una calle por la que no circularán ya los coches.
Desde el sector inmobiliario se reconoció ya en diversas ocasiones el potencial de esta zona, en especial de Iryda. "Es natural que se peatonalice. Será la piedra de toque que confirme que Calvo Sotelo como zona peatonal se potenciaría en la parte comercial", consideró desde Hábita Inmobiliaria Alejandro García Ríos.
Desde el punto de vista de este sector se insiste en que residencialmente la zona es ya muy buena pero está, en gran parte, habitada, sin solares que se puedan desarrollar aprovechando la expansión que se augura. "Es una zona que siempre fue cotizada", dice García Ríos, que no dejó de reconocer que, en todo caso, el hecho de que se vuelva peatonal esta vía siempre puede hacer subir los precios de venta. El alquiler, en cambio, está imposible, como en buena parte del caso urbano. Aunque asume que la "calle principal" siempre será Calvo Sotelo, este experto suma al potencial de Iryda la buena orientación de los edificios hacia el sol.
En cuanto al tramo de Justo Martínez que también se plantea como zona peatonal, Alejandro García Ríos señaló que las condiciones estéticas de algunos inmuebles de la zona son bastante mejorables por lo que, si se potencia como zona comercial, entiende que no estaría de más apostar por algunas rehabilitaciones.
La pretensión del gobierno local es paliar la supresión de aparcamiento en estas calles a través de la gran bolsa de estacionamiento público gratuito que se pretende habilitar al unir -tras la adquisición del solar junto al Teatro Principal- el parking posterior del teatro con el de la Casa das Letras. Además, la Policía Local buscará solución para compatibilizar la peatonalización de ambas calles con el acceso a garajes.