Nació en Buenos Aires, con doble nacionalidad gracias a su padre adoptivo, que era de Deza. Llegó a Lalín en el 2003 para asistir a su madre durante sus últimos días de vida. Dejó sus estudios y cruzó el océano con su novio. Al fallecer su padre adoptivo decide establecerse en Lalín. Trabajó de dependienta, camarera, comercial y secretaria administrativa, pero no se sentía realizada por completo. En 2014 tras recuperar sus hábitos deportivos descubrió sus dotes como entrenadora en la escuela de Atletismo Deza y en la que lleva años como atleta siendo campeona en varias ocasiones; consiguió la titulación especializada en atletismo, trabajó en el gimnasio Ferros, fue la primera instructora de Strong en la comarca y en 2018 abre su centro Coaching Deportivo ETP (Encuentra Tu Potencial). "Admiro a Maruja Gutiérrez por ser una pionera y es un orgullo este premio".