El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, hizo ayer parada en Silleda junto al vicepresidente, Alfonso Rueda, y el conselleiro de Cultura, Román Rodríguez. La visita de los tres políticos, que prosiguió después en Forcarei, se debe a que la política "no se hace solo desde los despachos o los atriles", apuntó Feijóo, añadiendo que "nos gusta pulsar la situación de este pueblo, que desde hace tiempo tiene una imagen cultural, de trabajo, de agro pero también de una villa de servicios".

Feijóo mostró la satisfacción de su partido tras haber heredado una Fundación Semana Verde en quiebra y que ahora se mantiene a flote e incluso generando beneficios. La recuperación de la Semana Verde es, a ojos del candidato del PP a revalidar la Xunta, una metáfora de lo que ocurrió con la administración autonómica en estos últimos 11 años. "Galicia estaba en una profunda crisis económica, con un paro que creció en 54.000 personas durante el último año del gobierno anterior, y hoy tenemos una Galicia con 43.000 personas menos en el paro, más de un millón de afiliados a la Seguridad Social e instituciones públicas solventes". Apuntó que tanto Silleda como Galicia "enseñaron dos cosas: pagar lo que se debe y no gastar más de lo que se tiene".

El político ourensano, que más de una vez paraba en Silleda y A Bandeira en sus viajes entre Santiago y su pueblo natal, adelantó que en su programa electoral se recogen varias medidas para que en el próximo mandato la Semana Verde "coja todo su esplendor" con un impulso al agro y al mundo forestal.