El gobierno lalinense se marcó como uno de sus retos a medio plazo la recuperación del Museo Galego do Títere. Desde su toma de posesión fueron varias ya las reuniones que se celebraron con los representantes de la compañía Viravolta y, en principio, las conversaciones van por buen camino para la reapertura de un espacio museístico único en Galicia, cerrado por voluntad de Viravolta unos días antes de las pasadas elecciones municipales.

El pasado día 17 el Concello contrataba la elaboración de los proyectos museológico y museográfico de este proyecto cultural con la empresa barcelonesa Ideas y estrategias para el Patrimonio por un importe total de 17.545 euros. Esta contratación es clave, no solo para la recuperación del museo, sino también como paso previo para el suministro de mobiliario para estas instalaciones.

A finales de julio el alcalde, José Crespo, anunciaba la intención de reservar más de 100.000 euros del Plan Concellos a recuperar este proyecto, entonces ya prácticamente desmantelado del Pazo de Liñares.

Ahora solo resta por, una vez que el ayuntamiento pueda dar forma al modelo de gestión que tendría este museo de las marionetas, conocer cuándo podría reabrir al público. Y, también, en qué situación quedarían los fondos propiedad de Viravolta, sin perder de vista también los bibliográficos.