El PP de Forcarei quiso denunciar ayer públicamente una "presunta irregularidad por parte del gobierno local" asegurando que el Concello encargó un suministro para el departamento de Servizos Sociais a un familiar directo de la alcaldesa, Verónica Pichel, "pese a la absoluta prohibición que tienen las administraciones locales para contratar y trabajar con familiares con el objetivo de evitar conflictos de intereses y tratos de favor", explican.

Los populares relataron que la administración municipal compró un par de zapatos por importe de 39 euros y que dicha compra "fue facturada" por la familiar de la regidora, "que tiene un establecimiento de calzado en la localidad, el pasado mes de agosto". "Dicha factura, registrada con el número de entrada 2036, fue presuntamente pagada pero la correspondiente resolución no fue informada, como es preceptivo, al pleno de la corporación, pese a que ya pasaron cerca de seis meses desde su presentación", indican desde el principal grupo de la oposición municipal.

"Entendemos que si una empresaria de nuestra concello presenta una factura fue porque se le encargó un servicio por parte de la administración y porque lo prestó, pera a Ley de Contratos del Sector Público de 2017 deja bien claro que las entidades locales en ningún caso pueden operar con empresas de ascendentes o descendientes, como es el caso", señala el PP. Esta fuerza reconoce que la cantidad es muy pequeña, "pero se trata del hecho", inciden. Insiste en que la resolución de esta factura todavía no fue informada al pleno, cuestión por la que los populares sospechan que "está ocultada deliberadamente porque el gobierno tenía mala conciencia con la misma".

Esta Redacción se puso ayer en contacto con el gobierno local para conocer su versión de los hechos. Fuentes municipales confirmaron que la factura a la que alude el PP se corresponde con un caso de emergencia social en el que el departamento actuó "siguiendo el procedimiento habitual".

Explican que se hizo una compra de todo el material necesario para que una persona usuaria, a través del programa de emergencia social, en un establecimiento de Forcarei pero se aclara que allí no tenían los zapatos que necesitaban y se adquirieron en la única tienda "que disponía de ese artículo" , establecimiento en el que, señalan, el Concello venía realizando compras de forma puntual desde hacía años. "Posteriormente, y dado que se trataba del comercio de un familiar directo de la alcaldesa se intentó la devolución del pedido pero ya no fue posible porque la persona beneficiaria ya no estaba en Forcarei. No quedaba otra salida para pagar los 39 euros y así se hizo", indican.

Llegados a este punto, la alcaldesa quiso solicitar al PP que "intente contribuir a la construcción de un Concello mejor y abandone esa política carroñera y cutre que practica". "No van a encontrar nada ilegal en nuestra gestión, aunque es evidente que les encargaría. Pero no todos somos iguales", remató.