La incertidumbre por el futuro del colegio Sagrado Corazón Deza, de Lalín, continúa. Ayer se celebró el consejo escolar en donde los distintos sectores de la comunidad educativa que lo conforman abordaron la situación por la que atraviesa este centro histórico. El encuentro, que tuvo lugar por la tarde, duró horas. Aprobaron el plan general del colegio así como las cuentas relacionadas con el dinero que efectúa la Xunta. Ahora avanzan para desbloquear la situación de cuotas sin pagar por parte de los padres por desconfiar del destino de ese dinero.

En el consejo escolar estuvieron presentes todas las partes: el administrador, Joaquín Pereira, el asesor Félix Puime, quien no tiene voto, pero se encargó de comentar distintos aspectos, los cuatro representantes de los padres, el presidente de la AMPA, Agustín Rodríguez, representantes de los profesores, entre otros, lo que sumaron 11 personas. En el orden del día, tal y como explicó Rodríguez, abordaron la aprobación del plan general de colegio que hay que remitir a la Xunta, así como las cuentas, en referencia al dinero que manda la administración autonómica para diversos gastos. Se aprobó con cuatro votos a favor, uno en contra y el resto fueron abstenciones. "Las abstenciones fueron principalmente porque nosotros queríamos haber visto antes todos los documentos y no sobre la marcha como ocurrió y ante la duda decidimos votar así, por si acaso, pero quedaron aprobados", apunta el presidente de la AMPA.

Fue la situación del centro lo que más ocupó el consejo escolar de ayer sobre todo en relación a que el colegio reclama la ayuda de los padres para salvarlo porque, según Félix Puime, todavía quedan 90.000 euros por cobrar de cuotas. "No es que los padres se nieguen a pagar lógicamente, pero al dudar de la credibilidad de hacia donde va ese dinero, decidieron parar los pagos", explica Rodríguez. Estos dejaron de efectuarse en los meses de diciembre y enero, e incluso, hay ciertos padres que tienen algo pendiente de noviembre. "Lo que estamos intentando hacer para desbloquear esa situación para poder hacer los pagos es que el colegio ceda voluntariamente y sin problema a que haya intervención de las cuentas, es decir, habrá un par de personas que controlen para donde va ese dinero, por ejemplo, si una madre, sin dar nombre, pagó 100 euros saber que por ejemplo, esos van para pagar, una nómina, por lo tanto, que no haya poder de ejecución, pero sí de control de ejecución", indica. Así que la idea es redactar un documento para determinar qué método se puede usar para tener este aspecto controlado. "Para que haya más confianza y conocer que el dinero que se ingresa se invierta en lo que es necesario", subraya.

Pagos al día

Rodríguez piensa que será en unas semanas cuando envíen al administrador concursal. Este representante de los padres señala que la prioridad en este momento es pagar las nóminas todavía pendientes. "Asimismo, ir teniendo los pagos al día del tipo víveres, es decir, que el comedor no esté desabastecido, que si hay que pagar una factura de teléfono, papelería... y por supuesto, las nóminas para que cuando llegue el administrador no quedé nada de atrás, porque tal y como nos informaron hoy en el Concello, el administrador se hará cargo desde que llega en pagar todo lo que haya a partir de entonces, desde cero, y para atrás nos indicaron que se haría cargo de cuatro nóminas, por eso es importante pagarlas antes para evitar que las demás queden sin cobrarse", indicó ayer Rodríguez. Señala que se están asesorando en todos esos temas y esperan a que sea en los próximos días cuando les hayan solucionando todas estas dudas.