El Concello de Silleda encarga un estudio para medir la incidencia del gas radón en el municipio, para cumplir con el Real Decreto 1439/2010, del 5 de noviembre, por el que se modifica el reglamento sobre protección sanitaria contra radiaciones ionizantes. Será uno de los ayuntamientos pioneros en adaptarse a la normativa, máxime cuando otro real decreto, publicado el pasado 27 de diciembre, considera que Silleda es una zona de riesgo. Este decreto modifica el código técnico de la edificación.

El estudio se llevará a cabo con una empresa especializada y su contrato tiene un coste de 1.680 euros. El informe incluye dos partes: una técnica y otra relativa al inventario de las áreas de riesgo que tiene el municipio. Para localizar estas zonas, la firma colocara 48 detectores en las dependencias de la casa consistorial, los centros sociales de los mayores de Silleda y de A Bandeira, los dos CEIP públicos, también en Silleda y A Bandeira, y el auditorio Manuel Dopazo. Estos detectores, que van a instalarse de inmediato, van a hacer mediciones de gas radón durante 90 días. Una vez recogidos todos los datos, los resultados serán analizados y, por último, la empresa indicará qué medidas hay que adoptar en cada caso.

El alcalde, Manuel Cuíña, explica que "este es un primer muestreo, y en función de los resultados, que contamos tener en abril, continuaremos o no con este estudio".

Tanto Silleda como buena parte de la comunidad gallega están reconocidos como zona de riesgo en la concentración del gas radón, debido al suelo granítico. Este gas es de origen natural y radiactivo. Tiene como un límite aceptable la existencia de 300 becquerelios por metro cúbico de aire en interiores.

En concentraciones muy altas puede provocar cáncer de pulmón. De hecho, es la segunda causa de este tipo de tumores después del tabaco. Para reducir su concentración en el interior de las viviendas, es recomendable instalar un sistema d extracción mecánica del gas en el sótano, sellar el piso y las paredes para que no se filtre a las demás plantas de la vivienda y, también, mejorar la ventilación de ésta.