El BNG de Vila de Cruces, liderado por Álex Fiúza, manifiesta que continuará trabajando por los vecinos, pero afirma que no entrará a formar parte de un gobierno "cuyo objetivo sea contar con tres votos más para improvisar y hacer y deshacer a su antojo". Subraya que para que acceda a formar parte del actual equipo "tendrá que haber una voluntad real del bipartido para sacar a este concello de la absoluta depresión en que está a caer en los últimos diez años" y recalca que deberán "aceptar parte de nuestro proyecto y presentar una propuesta firme y pública, algo que llevamos esperando desde junio del 2019".

Con respecto al ultimátum del PSOE, declara que "entendemos la obsesión que este tiene de que el BNG forme parte del gobierno porque la realidad es que siete meses después, se dieron cuenta de que los avisos que le habíamos dado desde nuestra formación eran reales". Y reprocha que "la codicia de estar gobernando les pudo y ahora se ven en una situación realmente compleja, en la que un gobierno en minoría no es quien de aplicar la verdadera política de consenso para enfrentar las enormes deficiencias que sufre nuestro concello, después de los últimos años de inoperancia del PP". Considera que se encuentran en una situación en la que el actual alcalde, Luis Taboada, "pretende llevar a cabo un mandato como si contase con una mayoría absoluta, como sí tenía su (ex) amigo Jesús Otero".

Asimismo, el grupo nacionalista critica la gestión de Taboada. "La adopción de malas prácticas del alcalde copiadas del anterior regidor, como la falta de transparencia o la negativa a cedernos copias de diferentes expedientes para poder conciliar nuestros trabajos con la política, son hechos de los que nada tiene que ver el BNG, ni está dispuesto a aceptar", recalca.

Falta de comunicación

Considera que existe falta de comunicación entre Xuntos polo Noso Concello y el PSOE. "El bipartito parece carecer de un proyecto o por lo menos de un consenso y la falta de comunicación entre ellos es más que evidente, algo que hemos denunciado en varias ocasiones y desde un primer momento, quisieron esconder sus carencias culpando al BNG de sus errores, de no ser quien de sacar obras ni programas adelante".

Reitera que el mayo de 2019, "los vecinos de Vila de Cruces eligieron un cambio, pero no una cara por otra, sino un cambio en el que primase el consenso, la verdadera política de negociaciones y de acuerdos para velar por un futuro". Y recuerda que "en aquel momento, el PSOE escogió caer del lado de Xuntos, sin tener en cuenta al BNG para nada, seguramente en clave electoral de futuro".

Mientras, el BNG indica que está haciendo un trabajo directo con los vecinos. "Desde el BNG no vamos a ceder a chantajes ni a presiones, más que nada, porque nuestras concejales y nuestro edil no están dispuestos a aceptar un cargo a cambio de un sueldo sin ningún tipo de fin, solo el de llenar la nómina fin de mes, además no aceptaremos mentiras". Y apunta que "es muy buena idea que el partido socialista le recuerde a Taboada el pacto de dos y dos años, pero en ningún momento dimos por hecho que estaríamos en el gobierno los dos primeros sin garantía de que aceptasen unos mínimos de nuestro proyecto. Para nuestra organización prima la responsabilidad y además, es una absoluta contradicción que un partido de gobierno nos quiera condicionar a entrar de inmediato, mientras está pensando en hacer las maletas y marcharse, esto sí que no es ni serio ni responsable", concluye el BNG.