Lalín perdió ayer a una de sus vecinas más longevas: Cruz Bouza Rojas, que falleció a los 105 años de edad. La mujer, que había llegado al pueblo hace 25 años, era natural de A Pontenova, en donde está siendo velada y en donde será enterrada hoy. Hasta allí tenía previsto desplazarse anoche el alcalde lalinense, José Crespo, que participó en el cumpleaños público que el Concello le organizó en septiembre del año pasado en el cruce de las calles Rosalía de Castro y Fonte Sanguiña, en donde tenía su residencia.