El año que comienza está llamado a ser el que solvente los históricos problemas de abastecimiento de agua que arrastra desde hace décadas la parroquia estradense de Codeseda. Para ello se concibieron las obras que han estado ejecutándose en las últimas semanas, centradas en la construcción de un nuevo depósito de agua. Hasta este punto de almacenaje tendrá que llegar el agua procedente de las dos nuevas captaciones previstas en los montes de A Grela. Sin embargo, el edil de Medio Ambiente, Juan Constenla, explicó que estas tendrán que aguardar a que el presupuesto municipal -todavía no fue presentado- esté en vigor.
El también primer teniente de alcalde garantizó, no obstante, que antes del verano la actuación estará hecha, buscando que los vecinos de esta parroquia no vuelvan a experimentar las restricciones de agua que se vienen viviendo en esta zona del municipio verano tras verano.
Constela indicó que el nuevo depósito -situado junto a la antigua instalación- está hecho y que la traída se suplementará ahora con el agua procedente de estas dos nuevas captaciones. "Antes del verano el problema estará resuelto", calculó el edil. Estas dos captaciones se realizarán mediante dos perforaciones dirigidas y efectuadas con una máquina especial que buscará el aprovechamiento directo de estos dos manantiales a una profundidad de unos 230 metros. El agua sería después dirigida hacia el depósito, situado en el lugar de Barro. El nuevo punto de almacenamiento de agua cuenta con una capacidad de 40.000 litros y estará conectado con la instalación existente hasta el momento.
Tras el primer corte de agua del pasado verano, el Concello apostó por adoptar una solución provisional, consistente en la captación de agua desde un arroyo cercano al depósito, una medida que -según se precisó- ayudó a que esta traída se abasteciese diariamente con 70.000 litros de agua. Este importante aporte permitió a la traída de esta parroquia resistir sin restricciones en el servicio el resto de la temporada estival.
