El Black Friday es una tradición importada de Estados Unidos y se celebra siempre el viernes siguiente al Día de Acción de Gracias, que a su vez tiene lugar el cuarto jueves de noviembre y que sirve para agradecer el buen resultado de las cosechas. Hay dos teorías sobre el Black Friday: una entiende el "Viernes Negro" como el intenso tráfico de regreso a sus hogares de miles de americanos tras pasar el Día de Acción de Gracias con su familia, y la otra, a que los comercios convierten sus números rojos en negros gracias a las ventas con descuentos de compras ya encaminadas a la Navidad.

En la provincia, el Black Friday sirve para cubrir el 24% de lo que se vende de menos en septiembre y octubre, según el estudio de la Federación Provincial. Los descuentos suelen oscilar entre el 20 y el 40%, aunque algunos comercios los elevaron incluso al 50%. En la comarca, la Asociación de Empresarios de Deza (AED) indica que la valoración general es ligeramente mejor que la del año pasado, y con efectos incluso en la jornada del sábado, ya que algunos locales mantuvieron sus descuentos. Lo que sí se agotó con motivo del Black Friday fueron los tickets en muchos comercios para la promoción del chocolate con churros gratis en locales de hostelería adheridos a la campaña. El problema del Black Friday es que frena, en seco, las ventas de las semanas anteriores, de tan arraigado que está ya en nuestro país. Es lo que hacen constar, por ejemplo, los integrantes del colectivo D'Tendas, "porque al final vendes lo que no vendiste en los 15 días anteriores, pero con descuentos", apunta Inés Fariñas, de modo que esta jornada, de algún modo, rompe también el ritmo de la temporada.

Sin salir de Lalín, en el Pontiñas Centro Comercial y de Ocio la impresión de este Black Friday es un ligero aumento de ventas en comparación con 2018 pero, a diferencia del año hubo picos en la afluencia de clientes: desde media mañana hasta las 13.00 horas y a partir de las 19.00. Muchos clientes aprovecharon por la tarde para ver la pasado navideña del casco urbano. Durante todos los domingos de diciembre y los dos primeros de enero, estarán abiertas las tiendas del centro comercial. Algunos locales incluso vendieron más ya en la jornada dominical que el sábado, como indica el gerente del centro comercial, Andrés Bahíllo. Tras el sorteo de 5 vales de 200 euros, el pasado viernes, el 22 de este mes el centro volverá a repartir 15 cheques, de entre 50 y 1.000 euros.

En Silleda la presidenta de ECOS, Yolanda Mato, apunta que al Black Friday se sumaron hasta empresas de pintura. La cita está más que asentada entre los clientes del municipio, que además tenían como reclamo durante esa jornada varios descuentos en locales de hostelería.

Tras la resaca del Black Friday, algún que otro local de Lalín lucía carteles del Cyber Monday con descuentos del 20%. La cita, que originalmente estaba restringida a artículos de tecnología y ala venta on line, también va dando pasos en las tiendas físicas y de otros sectores.