Uno de los problemas históricos de A Estrada es el depósito de agua situado en Codeseda. Según indicó el primer edil, José López, este presenta varias filtraciones, por lo que es necesario la construcción de uno nuevo. Las obras dieron comienzo esta semana para darle así solución a los problemas históricos del abastecimiento de agua. Esta es una mejora largamente demandada, ya que la infraestructura se ha mostrado insuficiente para atender las necesidades de los vecinos en los últimos veranos.

El nuevo depósito estará situado al lado del actual que presenta varias infiltraciones, según explicó el alcalde. La opción que se baraja desde el consistorio es que la próxima semana puedan quedar terminadas las obras de construcción del nuevo punto de almacenaje. Por otro lado, en los próximos días desde el consistorio esperan que se adjudique la realización de dos nuevas captaciones de agua en los montes de A Grela para surtir la traída como estaba previsto. Esta es una de las obras ejecutadas con cargo a bajas del Plan Concellos 2017, por un importe de 54.000 euros. El gobierno asumirá, después, con fondos propios las dos captaciones.

Las actuaciones para las captaciones se realizarán en A Grela mediante dos perforaciones dirigidas y efectuadas con una máquina especial que buscará el aprovechamiento directo de estos dos manantiales a una profundidad de unos 230 metros. El agua sería después dirigida hacia el depósito, situado en el lugar de Barro. El nuevo depósito contará con una capacidad de 40.000 litros y estará conectado con la instalación actual.

Esta parroquia de A Estrada está acostumbrada a que el agua falte cuando el termómetro sube. y así lo pudieron vivir sus residentes durante el pasado verano. Son ya muchos años de períodos estivales en los que el grifo, repentinamente, comienza a ofrecer un hilo de agua, hasta que un día se rinde y no echa ni gota. La situación de Codeseda, en una zona elevada del territorio estradense, imposibilitó en su día el abastecimiento de agua desde la traída del río Liñares e hizo que tampoco se contemplase entre los entornos beneficiados por la del Umia. Una y otra vez se unió a la petición de un consumo responsable la necesidad de buscar nuevos manantiales. Veranos como los de 2013 llegaron a recrudecer la falta de agua en esta parroquia, obligado a surtir el depósito cada día con 60.000 litros. Llegó a amanecer con 15 centímetros de agua. Algunos años este abastecimiento externo se tuvo que adelantar al mes de junio o prolongarse hasta entrado noviembre, en función de las condiciones meteorológicas y los niveles de consumo.

Si todo marcha según lo previsto, Codeseda se olvidará de los históricos cortes de agua en los meses de verano una vez que se finalice la construcción del nuevo depósito de agua y se realicen las dos nuevas captaciones previstas. Así, los vecinos podrán disfrutar del agua, haciendo un uso razonable y lo más respetuoso posible, pero perdiendo por fin el miedo a que el grifo no eche gota.