Movemento Veciñal Estradense (Móvete) denunció ayer que A Estrada continúa si servicio de Policía Local por las noches y quiso poner el acento en que la falta de agentes municipales de patrulla durante este turno "no fue un problema puntual" derivado de la planificación del período vacacional.

"Estamos en pleno mes de octubre y continuamos sin ese importante servicio para mantener la seguridad", remarcó la formación que encabeza Mar Blanco Casais, que acusó al gobierno local de ser el "único responsable" de esta situación. "Es incapaz de planificar los servicios públicos", consideró la edil. "La nefasta política de personal del señor López pone en jaque el servicio de la Policía Local durante las noches y también el servicio de limpieza", manifestó también Blanco Casais, que aseguró que "las consecuencias para los vecinos son los frecuentes casos de robos". Fue entonces cuando este grupo apuntó que la noche del miércoles al jueves "intentaron entrar en un comercio en pleno centro del casco urbano" .

"El señor López debe saber que es su trabajo mantener los servicios públicos y mantener unos servicios de calidad, tanto el de la Policía Local durante las noches para mejorar la seguridad como el mantenimiento y mejora del servicio de recogida de basura con personal contratado por el Concello", manifiestan desde Móvete. Esta formación también aprovechó la ocasión para exponer al mandatario que "así como puede contratar técnicos para determinados puestos también se pueden contratar operarios y policía local para mantener públicos y mejorar los servicios".

El turno de noche de la Policía Local de A Estrada se suprimió el pasado mes de agosto para hacer frente a la coincidencia de bajas y vacaciones de varios agentes, una situación sumada a la realidad de una plantilla de 18 agentes que en la actualidad solo cuenta con 11. Ante una situación que no permitiría contar con efectivos para mantener turnos de 24 horas, el Concello de A Estrada y la Policía Local tomaron la decisión de prescindir del turno de noche, dejando en manos de la Guardia Civil la atención de las incidencias que pudiesen ocurrir en el casco urbano. El alcalde, José López Campos, dijo en su momento que la idea sería recuperar la normalidad del servicio en el mes de septiembre, si bien más tarde se apuntaría a octubre. Indicó el regidor que con 11 efectivos se podrían garantizar los turnos de mañana, tarde y noche. No fue así en verano a causa de las vacaciones, decidiendo posibilitar que los agentes puedan disfrutar de este descanso en el período estival. Reconoció que con las vacaciones es "imposible" encajar un cuadrante que mantenga los tres turnos.