El alcalde aprovechó el pleno extraordinario de ayer para explicar a la corporación sus sensaciones sobre el viaje de anteayer a Madrid. En las dependencias del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) hizo su primera parada para interesarse, con técnicos de este departamento dependiente del Ministerio de Fomento del estado del muchas veces anunciado proyecto del apeadero del Tren de Alta Velocidad (TAV) en la zona de Botos. Crespo apuntó que el proyecto inicial de esta infraestructura determina que técnicamente sería viable y que su construcción podría suponer un coste de 4,5 millones si se hace solamente por una vía o justo el doble en el caso de que sean dos.

En la cámara municipal expuso que se daría por satisfecho si Fomento accede a que en Lalín puedan parar un tren a la mañana y otro a la noche como ocurrirá en A Gudiña y recordó que a partir del próximo año ya comenzarán a funcionar los operadores externos y por tanto se podría aprovechar esta infraestructura para que se habiliten lanzaderas de conexión con Ourense. Y dijo que no convenía olvidar que en breve el tiempo del trayecto en tren entre esta ciudad gallega y Madrid volverá a recortarse. En todo caso, manifestó que al tratarse de una decisión política, volverá a contactar con este departamento ministerial una vez se forme el nuevo Gobierno central.

Captación de empleo

Durante su estancia en la capital el alcalde aprovechó para establecer contactos con la sociedad Aguirre Newman España. En este sentido, desveló que su intención es aprovechar la experiencia de esta compañía para la captación de empresas interesadas, siempre dentro de una estrecha colaboración con el Concello, de asentarse en el municipio. "Me dijeron que eran los mejores de España en esto", relató.